Las pérdidas económicas en alimentos y daños a electrodomésticos por el deficiente suministro de energía eléctrica suman cientos de dólares entre los residentes de la barriada Simón Bolívar, en el corregimiento de Lídice, de Capira.
En este poblado las interrupciones eléctricas por más de 30 horas han dejado de ser una novedad desde hace ya varios años.
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Los microempresarios que poseen restaurantes aseguran que las pérdidas en productos que requieren refrigeración son cuantiosas al quedarse sin electricidad.
La situación es calificada de “trágica” por parte de los residentes de esta barriada, quienes aseguran no recibir respuesta alguna de parte de la empresa eléctrica responsable de la zona.
Según los residentes de esta barriada, pese a que el servicio eléctrico es deficiente la facturación mensual es constante.
Durante el año 2021 las interrupciones eléctricas fueron el principal problema de los estudiantes que recibían sus clases en la modalidad virtual e incluso para quienes laboran desde sus casas.
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La verdad es que estamos bien cansados de esta situación”, indicaron los residentes, quienes exigen la intervención de la Autoridad de los Servicios Públicos (Asep).
Según datos estadísticos de la Asep, durante el mes de enero del 2022 se presentaron 44 reclamos por algún tipo de irregularidad en el servicio eléctrico. A nivel nacional se presentaron 256 reclamaciones.
