El expeleador estadounidense Mike Tyson reconoció, durante su participaciónen el programa de televisión británico "Good Morning Britain", que su "vida entera es un arrepentimiento".
Las palabras del que fue campeón de boxeo se dieron tras participar debate sobre el aumento de los crímenes con arma blanca en Inglaterra, especialmente cometidos por menores de edad.
Intercambiar palabras con los presentadores del programa hicieron que Tyson llegase a compararse con los jóvenes.
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"Yo era igual que estos niños. Solía estar en pandillas, solía tener armas, solía dispararle a la gente, solían dispararme y todo eso. Ya no quiero vivir mi vida así. Vengo de un ambiente hostil, crecí sin mi padre, con mi madre que era una trabajadora sexual. Siempre éramos humillados, nunca tuvimos orgullo en nuestra familia, nadie sabía quiénes éramos", admitió Tyson.
"Desde que era un niño de 12 años solamente me enseñaron a golpear a la gente, a derribarlos, humillarlos, a romper su voluntad, a demostrarles que era superior a ellos, que era mejor que todo el mundo. Pero en realidad yo era un niño asustado e inseguro. No tenía idea lo que hacía, pero me hacía sentir bien y todo el mundo me decía que era bueno en eso. Eso me llevó a convertirme en este hombre, este tirano que no tenía respeto por nada y que a menudo decía algunas cosas realmente extrañas e irrespetuosas a mis oponentes. Ahora que veo todo esto pienso que hice todo mal", continuó Tyson antes de ir más allá remarcando que su complicada infancia no justifica su violencia y confesando que está muy arrepentido de la vida que ha llevado.
"Mi vida entera es un arrepentimiento. Toda mi vida, mis acciones, mi conducta, muchas cosas que he hecho en mi vida, especialmente como luchador. Menospreciar a muchos luchadores solo para convertirme en una renombrada figura y demás cosas. Ojalá no hubiera hecho eso, me encantaría no haber dicho muchas de las cosas que dije a otros seres humanos".
El boxeo fue su salvación
Tyson también admitió que el boxeo le ayudó a reconducir su vida y evitó que cometiera algún asesinato.
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"Yo no creía que pudiera tener una vida mejor hasta que comencé a boxear, entonces vi esperanza. Al margen de esto, pensé en matar a gente, la vida de las personas no significaba nada para mí".
En este sentido, Tyson remarcó que lo que le ocurrió a él con el boxeo es un caso excepcional porque no todos los que comiencen a practicar algún deporte "van a ser campeones del mundo".
"Debemos usar el boxeo para que la gente pueda hacer amigos y generar vínculos con otros. Enseñar amor y compasión", subrayó.