La púgil panameña Laura Ledezma, quien ocupa la primera posición en el peso supergallo de la Asociación Mundial de Boxeo AMB, no solo se preocupa y trabaja por ser la mejor sobre el cuadrilátero.
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Y es que a nivel personal, esta púgil, de 31 años de edad, también tiene sus objetivos, fuera de lo deportivo, bien trazados.
"Además de tener como meta ser campeona mundial, quiero terminar la maestría en Seguridad Industrial y Salud Ocupacional", manifestó Ledezma a día a día.
Lo más difícil
Por otra parte, Ledezma manifestó que regresar al deporte de las narices chatas y orejas de coliflor fue la prueba más difícil que tuvo que pasar como boxeadora.
"El boxeo es un deporte muy sacrificado, golpes y dietas, entre otras cosas. Regresar al boxeo después de cinco años de inactividad fue difícil. Me propuse como meta mantenerme un año en el boxeo pasara lo que pasara", dijo.
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Agregó: "Al regreso fue agotador y frustrante bajar de peso, no tener la misma velocidad, condiciones que tenía anteriormente, y cuando ya estaba lista para subir al ring de boxeo, que no me tomaran en cuenta en los eventos de boxeo".
La boxeadora cerró diciendo que estará viendo acción en las últimas semanas de febrero próximo.