El futbolista panameño Manuel Vargas dijo sentirse sumamente aliviado tras poder abandonar Armenia -país al que había llegado para jugar con el FC Lori-, debido a que actualmente se encuentra en guerra con Azerbaiyán.
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"Es un alivio muy grande haber salido de Armenia porque la tensión que se vivía era tremenda", comentó a día a día Vargas, quien estaba en el país euroasiático junto a su compatriota Carlos Gutiérrez.
"Hasta la manera de hablar y los ánimos cambiaron porque había preocupación en la familia, nosotros queriendo salir del país lo más pronto posible", agregó el mediocampista.
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El internacional con la selección de Panamá no dudó en afirmar que esta ha sido una de las experiencias más difíciles de su vida.
"Sí, ha sido una de las experiencias más aterrorizantes que he podido tener en mi vida... viendo que el país está en guerra, que civiles ya estaban siendo afectados, familias perdiendo a sus seres queridos... fue una experiencia muy desagradable que no se la recomendamos a nadie", manifestó.
Tanques de guerra
Vargas cuenta que en el hotel donde se encontraba "no escuchábamos las bombas, pero sí veíamos los equipos de armamento de Armenia y los tanques de guerra que pasaban".
"Mucha gente siempre tiene el temor por una guerra, pero ellos (en Armenia) están como acostumbrados a esa situación... pero para nosotros era algo que no habíamos vivido", sentenció el volante, de 29 años.
'La tensión que se vivía era tremenda'.
No escuchábamos las bombas, pero sí veíamos los equipos de armamento de Armenia y los tanques de guerra que pasaban.
29
años de edad tiene Vargas.
Teníamos en el equipo compañeros de Israel que decían que para ellos eso era normal.
