El exgrandes ligas y miembro del Salón de la Fama, el panameño Mariano Rivera, acompañó el jueves al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para celebrar el día inaugural de las Grandes Ligas, en la Casa Blanca.
Mariano hizo su aparición sorpresa en la sesión informativa de Trump sobre el coronavirus.
Al terminar con la información, ambos se reunieron con un grupo de unos 15 jóvenes peloteros que se lanzaban la pelota en el jardín sur de la Casa Blanca. Uno de los jugadores le dio al presidente y a Rivera un guante y una pelota, y pronto se les unieron.
"No había nadie como Mariano", manifestó Trump mientras compartía con el único jugador en recibir el 100% de los votos para ingresar al Salón de la Fama de las Mayores.
Trump también manifestó que el regreso de los deportes era "algo muy importante psicológicamente para nuestro país" en medio de la pandemia de coronavirus.
Trump elogió el trabajo de Rivera con los niños y su historial como cerrador del equipo favorito del presidente. Anteriormente, le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad.
"Creo que las Grandes Ligas están poniendo un ejemplo al jugar en estadios vacíos. Así como otros deportes", declaró Trump. "Queremos regresar a la normalidad. La clave es volver a la normalidad", agregó.
Después de la ronda con la pelota, Trump, Rivera y los peloteros de ligas infantiles y sus entrenadores se tomaron una fotografía grupal.
Celebraron la inauguración de las Grandes Ligas.
No había nadie como Mariano
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campañas jugó Mariano con los Yanquis.
Creo que las Grandes Ligas están poniendo un ejemplo al jugar en estadios vacíos. Así como otros deportes.
