La futbolista mexicana Janelly Farías reveló que estuvo muy cerca del suicidio, luego de que su familia la rechazara por su orientación sexual.
"Al principio mi familia me rechazó por ser gay. Fue lo más difícil de mi vida. Yo llegué a un punto donde vivía en la depresión y me volví alcohólica. No sabía qué hacer con mi vida y me quería suicidar", confesó en una entrevista que brindó a la Fifa.
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"Es necesario hablar de estas cosas porque a la gente le da mucho miedo decirlo y normalizarlo. Es importante decirlo porque hay muchas personas que quizá se sienten solas cuando en realidad no lo están", consideró la seleccionada azteca.
En esa dura etapa de su vida, Farías dijo que contó con el apoyo de su hermano menor, su cuñada, primos y amigos, pero quien resultó fundamental fue su sobrino Christian Emiliano.
Salvó su vida
"Él me salvó la vida. Yo estaba en el punto más bajo, donde me quería quitar la vida", relató.
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"Él tenía año, año y medio. Cuando nació, poco a poco me fui acercando a él. Un día que quise quitarme la vida fui a verlo y el niño me abrazó. En ese momento él sintió mi dolor; en cambio, yo sentí su amor. Y algo en ese momento cambió mi perspectiva de la vida; supe que tenía que encontrar la manera de que mis papás me aceptaran", manifestó.
Farías afirma que, al final, sí pudo conseguir tener una buena relación con sus padres.
Llegó un punto donde dije 'ya no puedo vivir así; no puedo con que mi vida sea un tabú, que no me acepten, que no pueda traer una novia a la casa y que mis hermanos sí puedan.
"Yo a los 18 años fue cuando me enamoré por primera vez de una mujer y fue hasta los 22-23 años que tuve esa plática con mis papás".
No aceptaba su orientación sexual.
30
años tiene Farías.
