Hay que ver que el excapeón del mundo estadounidense Mike Tyson hizo muchas cosas extremas durante el clímax de su carrera profesional, pero una de las más locas tuvo a un gorila de espalda plateada como protagonista.
Tyson desveló, según registran algunos medios internacionales, que intentó sobornar con $11,622.53 al guardián del zoológico para que le abriese la jaula y le dejase pelear a puñetazos con el animal en mención, el cual puede alcanzar el 1,75 metros. de altura y los 440 libras de peso.
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Este intento de pelea ocurrió en los años ochenta, durante una cita supuestamente romántica del también conocido como "Iron Mike" con su exesposa Robin Givens en el zoológico.
"Le pagué al guardián para que nos dejase entrar en el zoológico solo a Robin Givens y a mí. Al llegar a la jaula de los gorilas vi a uno que estaba acosando al resto... era poderoso, pero sus ojos eran como los de un niño inocente. Le ofrecí $11,622.53 dólares para que me abriese la jaula y me dejase pegarme con el gorila... pero declinó la oferta", explica Tyson, gran amante de las palomas en su adolescencia y que tuvo a un tigre como mascota.
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Entre otros de los episodios "locos" de Tyson destacan el haber peleado drogado y utilizado un pene falso para pasar algunas pruebas antidopaje.
Le pagué al guardián para que nos dejase entrar en el zoológico.
El exboxeador quiso meterse a la jaula del animal para enfrentarse mano a mano con él e impresionar a su exesposa Robin Givens.
El animal pesaba 440 libras.
52
años tiene el expúgil.