Agustina Santos clama por ayuda, vive entre pedazos de plásticos, bejuco y palos
Agustina Santos, contó que por días sus hijos no prueban un bocado de comida, pero esto no ha sido impedimento para que dejen de ir a la escuela.
En una frágil vivienda construida de pequeños pedazos de plástico, bejuco y palos que al soplar el viento se desprenden y que cuando llueve todo se moja, así es como vive Agustina Santos, con sus hijos desde hace varios años en la comunidad de El Cerro a orillas de la quebrada Muela en el distrito de Santa Fe, en la provincia de Veraguas.
Agustina, cuenta que llora todos los días porque se siente impotente ante esta condición infrahumana por la que atraviesa. Agregó que por varios días sus hijos no prueban un bocado de comida, pero esto no ha sido impedimento para que sus hijos, uno de ocho y otro de cinco años de edad dejen de ir a la escuela.
En esta vivienda no se cuentan con ninguna comodidad para vivir o para los niños puedan hacer sus tareas.
Leer también: Las mujeres se movilizan en el 8M, aunque el coronavirus frena la celebraciónNo se le considero en pasadas administraciones
Estas personas habitan en medio del bosque hasta en riesgo de ser atacados por serpientes y otros insectos venenosos.
Agustina comentó que pese a la crítica condición en la que vive la pasada administración gubernamental, en este caso Ministerio de Vivienda, Mides y otras instituciones no se le consideró para ningún tipo de programa social siendo una mujer panameña con iguales derechos.
Pareciera que la suerte podría ser igual porque a un mes de que las actuales autoridades conocieran el caso aún esta familia sigue soportando hambre y las malas condiciones por la extrema pobreza.
Leer también: Miviot intenta legalizar terrenos en Puerto Caimito