Cada 2 de noviembre se conmemora en Panamá, el Día de los Difuntos. Es por eso que muchas personas visitan los lugares donde reposan los restos de sus familiares.
A menos de 10 días, los vendedores ambulantes se encuentran en las calles tratando de recoger un par de reales a punta de la venta de las flores, coronas y demás objetos que buscan para llevarle a sus difuntos.
Para Gina Pérez, vendedora de flores, con supuesto ubicado en el parque Feuillet, en La Chorrera, los precios de las flores varían desde un dólar hasta quince dólares.
"Tenemos ramos desde un dólar hasta quince dólares, en el caso de las coronas tenemos desde cinco dólares hasta treinta y cinco balboas", expresó.
Según la señora Pérez, la gente busca de todo, a veces colores para hombres, mujer o niños, pero siempre que sean colores vivos, todo hasta el 2 de noviembre, porque ya después el negocio se cae.
"A veces nos queda mercancía, por eso nosotros empezamos a promoverla con todo unos quince días antes. Este puesto atiende 24 horas al día para tratar de vender todo lo posible".
El año pasado, nos cuenta la vendedora, les quedó bastante mercancía porque la cosa estaba algo dura, por tal razón espera que la cosa mejore este año.
La ventaja de las flores artificales es que duran más tiempo que las naturales, el único problema es que a veces se vuelven criaderos.
Muchas familias aprovechan para visitar a sus seres queridos por lo que le llevan flores de colores a las tumbas y hasta velas.