Un llamado de atención a las autoridades de investigación judicial del Ministerio Público, es lo que pidió Orlando West, por el caso de su hermano de 92 años de edad, Ruperto Arturo West, relacionado con violencia en su hogar y despojo de su vivienda, por familiares.
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De acuerdo con West, él ha llevado el caso ante las fiscalías del Ministerio Público, pero hasta el momento no se ha hecho justicia, debido a que la hijastra de su hermano en conjunto a otras personas, lo violentaban en su propia casa.
Hasta el punto que él tuvo que llevarse a su hermano, desde su casa en La Chorrera, provincia de Panamá Oeste, hacia su hogar, en un apartamento en el Residencial Irving Saladino, corregimiento de Sabanitas, en la provincia de Colón.
Piden que paguen los responsables de los maltratos y abusos
Esta situación de violencia contra el adulto mayor inicio, relata West, cuando él (su hermano) adquirió su vivienda en La Chorrera en 1978, pero su esposa permitió que su hija (en su caso, hijastra) viviera con ellos, debido a que tenían espacios en la residencia.
A través de los años, la misma ha abusado fisicamente y verbalmente contra el adulto mayor, al punto que el escondía su dinero en su ropa interior, sin embargo, lo forcejeaban para arrebatarle el dinero.
A pesar de haber colocado la denuncia, aún no se tiene respuestas y los abusos desde el 2004 se volvieron constantes.
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Según West, la justicia es selectiva y ciega, debido a que recientemente se dio la captura de presuntos delincuentes que fueron llevados a Punta Coco, pero en el caso del hermano Ruperto, indefenso, sus agresores permanecen libres.
West señala como responsables, la hijastra, la hija de la misma y el hijo de su hermano, quienes han despojado de la vivienda a su hermano.
