Las deudas de familiares de difuntos sepultados en cementerios municipales de la provincia de Panamá Oeste, alcanza cifras millonarias y que se consideran prácticamente incobrables por los ayuntamientos.
En el distrito de Arraiján esta morosidad alcanza la suma de $1,297.810.09, una cifra que según la tesorería municipal data de varios años.
La opción de realizar exhumaciones por la deuda que acumulan las familias, aunque no se ha descartado, la decisión aún no se ha tomado.
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El municipio de Arraiján administra cinco cementerios localizados en Arraiján cabecera, Burunga, Veracruz, Juan Demóstenes de Arosemena y Vista Alegre.
Carlos Moran, secretario general de la Alcaldía de Arraiján, indicó que pese a la morosidad se están realizando trabajos de construcción de bóvedas y criptas con fondos de los Impuestos de Bienes e Inmuebles (IBI).
En el distrito de Chame, la deuda se eleva a 13 mil dólares en los dos cementerios de Chame cabecera y Bejuco
Héctor Rodríguez, a cargo del mantenimiento del cementerio, asegura que algunas familias con parientes sepultados en este campo santo solo se presentan cuando requieren dar sepultura a algún otro familiar.
La alcaldía informó que existe una lista de 100 restos cadavéricos sepultados en el cementerio municipal de Bejuco que serán exhumados y trasladados a una fosa común.
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Para el 2020, la administración del cementerio municipal de La Chorrera hizo un llamado a los deudos a cumplir con el pago del arrendamiento de bóvedas y osarios.
A la fecha, según un nuevo levantamiento, la deuda por el uso de bóvedas suma 30 mil 285 dólares. El monto de la morosidad por terrenos y osario aún se está recabando.