- Monseñor Aguilar, durante la eucaristía, pidió conducir con prudencia.
Y es que Radamés Rodríguez, Deyka Pérez, Yamileth Veroy, Leanis Pérez, Yamileth Concepción y Felicia Rodríguez, las seis víctimas fatales del accidente ocurrido la mañana del martes, fueron sepultadas.
Los niños de la escuela de la comunidad de Palo Verde llegaron a la iglesia San Francisco Javier del distrito de Cañazas acompañados de educadores y sus padres, cargados de flores, sus rostros estaban enrojecidos por el dolor que les causaba ver a su maestro Radamés Rodríguez sin vida dentro de un ataúd.
Los actos religiosos de esta despedida hacia la eternidad fueron dirigidos por el monseñor Audilio Aguilar, también cañaceño y quien se mostró conmovido por lo ocurrido y por ser sus paisanos, en ocasiones le afloraron lágrimas por el sufrimiento que dejó la tragedia.
La comunidad cañaceña está de duelo, lamentó Francisco Brea, diputado de ese circuito.