Endometriosis, padecimiento silencioso que daña la calidad de vida de la mujer
Miles de mujeres en el mundo sufren por esta condición sin saberlo.
Desde el momento en que tiene su primera menstruación, la mujer puede empezar a sentir cólicos, algunos muy intensos que se controlan con medicamentos; sin embargo, cuando el dolor se vuelve incapacitante, hay una señal de alarma que no debe ser ignorada.
En Panamá, no existen estadísticas sobre la endometriosis, un término que cada vez se escucha más, pero que muchas ignoran que lo padecen, muchos otros no tienen idea de qué es. Pero eso lo sabe muy bien Mercedes Valdés Salamín de Poveda, quien por años fue torturada por fuertes dolores cada vez que le llegaba la menstruación, no fue sino hasta que cumplió 27 años que supo que padecía endometriosis, tras haberse desarrollado a los 9 años. "Parte de mi niñez y toda mi juventud la pasé sufriendo dolores y cólicos insoportables". Recuerda que su madre y abuela trataban de calmarla dándole té que no hacían efecto.
¿Qué es y cómo se trata?La endometriosis es una condición crónica propia de la edad reproductiva de la mujer, se da cuando el endometrio (un tejido que está dentro del útero) por razones aún inexplicables se sale del útero, lo que ocasiona inflamaciones y sangrado que desencadena dolor.
La doctora Julissa Garisto, ginecóloga infanto-juvenil, resaltó que la principal alarma durante la adolescencia se da cuando el cólico menstrual no mejora con antiinflamatorios, que es muy intenso y se asocia con dolor de cabeza, náuseas, vómitos, palidez, desmayos, diarrea y que produce ausentismo al colegio.
No hay registros en Panamá
Garisto afirmó que en Panamá no se manejan estadísticas de los casos, pero según la tendencia mundial, una de cada 10 mujeres padece la enfermedad y no todas lo saben. No hay una edad fija de aparecer.
Muchas veces las mujeres se dan cuenta que tienen endometriosis cuando intentan salir embarazadas y no pueden, allí ya el caso está muy avanzado. Sin olvidar cuando se está en la vida laboral, que se vuelve aún más complicado, pues los jefes no comprenden que el dolor realmente "las tumba" al punto que se dificulta cualquier labor. "Es una cosa que te parte en dos", afirma Valdés Salamín, quien lamenta que el desconocimiento hace que se crea que es una exageración o "un drama" cuando una mujer se refiere al dolor.
Por esta razón, desde 2011 empezó a concienciar a las personas sobre esta condición que afecta incluso a niñas y en 2014 creó la Asociación Endometriosis Panamá (Aenpa), con el fin de apoyar a las pacientes de endometriosis, sus familias, parejas y amigos, para que conozcan sobre el mal silencioso que afecta a miles de mujeres en el mundo.
El tabú de visitar al ginecólogoEl caso va más allá, pues tal como comentó Salamín de Poveda y confirmó la doctora Garisto, quien colabora con la asociación, se dan casos de jóvenes en etapa escolar a quienes sus padres incluso deben cambiarlas de escuela o estudiar por módulos, pues profesores no comprenden que no es un simple cólico que les da.
Más lamentable aún, los casos de niñas hasta de 12 años que ya han sido diagnosticadas con endometriosis.
Otro factor de riesgo es la malformación obstructiva en el sistema reproductivo en las niñas, donde un 11% de ellas puede presentar endometriosis. Es aquí donde entra la importancia de la atención ginecológica temprana. En Panamá existe el tabú de la visita al ginecólogo por primera vez.
Los tres momentos más importantes para visitar al ginecólogo, a juicio de Garisto, son en la etapa preescolar para ver la anatomía de la niña y detectar alguna malformación. Otro es cuando empieza la pubertad para verificar que los cambios físicos lleven el orden esperado e ir orientando a la niña hacia la llegada de la primera menstruación. Luego, seis meses después de que haya llegado la menstruación. Es posible también que sea llevada una vez al año, ligado a hablarles sobre prevención de embarazos, enfermedades sexuales y demás.
Entérate: Rescate de los atrapados en la cueva de Tailandia se cobra la primera vidaMal sin cura
La endometriosis no tiene cura, solamente tratamientos que intentan frenar la progresión de la enfermedad. Y es que, esta puede afectar otros órganos, no solo el aparato reproductor, sino también vejiga, pulmones y otros.
La señora Mercedes ha estado sometida a fuertes tratamientos con medicamentos tal como los que les dan a pacientes de cáncer de mama y/o próstata. Ha sido sometida a quimioterapias.
Pero, según Garisto, quien también es ginecóloga obstetra, al detectar y confirmar la condición, con un tratameinto adecuado se mejora notablemente la calidad de vida y también en cuanto a fertilidad, que es una de las preocupaciones de las mujeres.
Informarse es primordial
Con el fin de informar a la comunidad sobre la condición de la endometriosis, recientemente la Asociación Panameña para el Planeamiento de la Familia (Aplafa) firmó un convenio con AENPA otorgándole un espacio en sus clínicas, para dar orientación del padecimiento a los usuarios.
La alianza tendrá el término de dos años y se darán charlas, consejerías e información, por parte de personal capacitado de Aenpa.
El convenio fue firmado Mercedes Valdés Salamín de Poveda, fundadora y presidenta de Aenpa, y Rossana Uribe Saldívar, presidenta de la Junta Directiva de Aplafa. Este será un complemento a la labor de información y concienciación que realiza la asociación en escuelas, universidades, ferias de salud y otros lugares.