La región de Azuero contaría con una sala alterna para atender pacientes de COVID-19 que requieran ventilación, en caso que se ocupe en su totalidad la unidad de cuidados intensivos del hospital Anita Moreno, centro hospitalario dispuesto para la atención de los casos de las provincias de Herrera y Los Santos.
La sala, ubicada en el hospital Cecilio A. Castillero de Chitré, tiene 10 camas y funciona hasta el momento como sala de aislamiento temporal para pacientes sospechosos.
Sin embargo, luego de una donación de 10 ventiladores por parte de los gobiernos de Estados Unidos y Taiwán, a través de la fundación Manuel Cohen, se adecuará la sala para que empiece a operar en caso que aumente la demanda por un incremento de casos positivos en la región.
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Luis Pérez, director regional de Salud de Herrera indicó que los nuevos ventiladores aumentarán la capacidad instalada de atención a pacientes positivos.
También se instalarán ocho ventiladores adicionales en el hospital Anita Moreno, lo que amplía la capacidad de atención a aquellas personas que requieran respiración asistida debido a complicaciones por COVID-19.
Esperemos no utilizarlos, pero la población puede estar tranquila, ya que contamos con suficientes ventiladores para atender a aquellos que así lo requieran, puntualizó Pérez.
Se trata, según Pérez, de un gran aporte para el soporte técnico con el que cuenta el hospital, ubicado en Chitré.