Durante dos semanas, gran cantidad de humo tóxico ha estado emanando del vertedero de Los Santos, ubicado en el sector conocido como La Honda, afectando a familias del sector, pero además a moradores de áreas como El Espinal, en Guararé.
Se trata de una situación que no es nueva para quienes viven en los alrededores del vertedero a cielo abierto, quienes piden a las autoridades locales poner mano dura y realizar las inversiones necesarias para frenar de una vez por todas la contaminación que en este sitio se da.
Y es que en este lugar se disponen los desechos del distrito de Los Santos, sector que cuenta con 15 corregimientos de los cuales solo en nueve se realiza recolección por parte del Municipio de Los Santos.
Para el alcalde electo de este distrito, Raúl Montenegro, el tema de la disposición final y estado actual del vertedero, es un tema que no puede esperar y debe ser abordado en sus primeros 100 días en el cargo que ocupará a partir del 2 de julio.
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Indicó que ya ha iniciado una serie de planificaciones con el fin de poder ordenar el vertedero y evitar los incendios que tanto afectan a la población.
Según dijo, será a través de un acuerdo de colaboración público-privada, o bien, tocando las puertas de la Autoridad de Aseo, para lograr que se tome en cuenta este lugar para inversiones importantes, que permitan poner fin al manejo que hasta el momento se le ha dado.
“Tenemos que escoger entre estas dos vías importantes, y ya tenemos reuniones propuestas con la Autoridad de Aseo, para que nos inviertan directamente en el vertedero. También una colaboración mixta con el municipio de Los Santos y la empresa privada”, indicó Montenegro.
El alcalde electo indicó que lamentablemente en este vertedero de basura no se realiza ningún tipo de tratamiento a los desechos, lo que ha causado que los lixiviados lleguen directamente al mar, fuentes de agua y pozos profundos cercanos.
Indicó además que se ha analizado la posibilidad de una solución regional a este tema, ya que todos los distritos de la provincia tienen el mismo problema con la disposición final de la basura, que llega a sitios dispuestos como botaderos de basura y no a rellenos sanitarios donde se pueda realizar algún tratamiento o reciclaje.