La frase favorita de Enrique Antonio Ryce Diez, de 64 años, era "Voy y vengo", algo que no le pudo cumplir a su familia, ya que falleció en las inundaciones que se registraron el pasado domingo en Arraiján.
Margoth Bozo, su pareja por muchos años, explicó que han sufrido mucho por las inundaciones, ya que en 2006 lo perdieron todo.
Esa fue la inundación que anegó la plaza donde está el Rey de Vista Alegre. También muchas casas en Nuevo Arraiján y Bello Amor quedaron en agua hasta el techo.
Las pérdidas de aquel entonces, cuando su casa ubicada en San José, Arraiján, se inundó, no fueron nada para Bozo, en comparación con las de este domingo, cuando la naturaleza se llevó al padre de sus cuatro hijos.
Cuenta Bozo, quien es educadora, que gracias al sacrificio de Ryce, quien en su juventud la animó para que siguiera sus estudios.
Dijo que sus hijos están muy afectados, y es que su esposo siempre se desvivió por ellos, pues cuando ella estuvo laborando en Darién, él antes de irse a trabajar, le cocinaba a los niños y les dejaba su comida lista.
Ella siempre recordará la mañana del domingo que falleció porque, antes de irse, les dijo "Voy y vengo", sin embargo, eso no ocurrió.
Relató que sus hijos se lanzaron a las embravecidas aguas de la quebrada San José, pero nada pudieron hacer para salvarle la vida a su progenitor.
"Toda esta área de San José era potrero cuando llegué a vivir aquí, hoy todo es barriada y todo está colapsando, la naturaleza está reclamando lo suyo".
La señora Bozo hizo un llamado al Ministerio de Obras Públicas para que limpie y haga un dragado a la quebrada San José.