Jóvenes privados de libertad reciben becas para continuar estudios escolares
Dijeron tener toda la disponibilidad para sacar provecho a esta oportunidad.
Un total de 29 jóvenes adultos privados de libertad, bajo Ley 40 del Régimen Especial de Responsabilidad Penal para la Adolescencia, recibieron becas para continuar estudios escolares por gestión del Ministerio de Gobierno (MINGOB) a través Instituto de Estudios Interdisciplinarios (IEI) con el Instituto Panameño de Educación por Radio (IPER).
Las becas del IPER se distribuyeron entre cuatro estudiantes de básica general, 17 de premedia y ocho de media que forman parte del Departamento de Sanciones y Medidas No Privativas de Libertad (SMNPL) y Jóvenes Adultos del IEI, quienes por contar con la mayoría de edad y por diversas razones han sido trasladados a centros penitenciarios para adultos y desean proseguir sus estudios para salir adelante como personas productivas al país.
Con el slogan “nunca es tarde para aprender”, el programa abalado por el Ministerio de Educación (MEDUCA) surgió por iniciativa del sacerdote Fernando Guardia Jaén (Q.E.P.D.) de la orden de los Jesuitas, para personas que han salido del sistema formal educativo o con problemas de analfabetismo y desean completar la escolaridad, implementándose en el sistema carcelario mediante módulos tutelados por reclusos capacitados para dictar las asignaturas que conforman el pensum académico.
“Por el compromiso imperante de buscar alternativas que ofrezcan una oportunidad de continuar el proceso educativo de nuestros muchachos, realizamos el enlace con Fray Francisco Palomares de la Pastoral Penitenciaria para formar parte del programa de becas del IPER, donde nuestros chicos continuarán sus estudios desde el nivel en que se encuentran hasta culminar el sexto año, la idea es que completen el ciclo escolar”, manifestó Zobeida Robles, trabajadora social de SMNPL del IEI.
Entre los requisitos para conservar la beca están el aprobar todas las materias, aspiración de superación, mantener orden, disciplina y respeto por los profesores que al igual que los alumnos forman parte de la población carcelaria.