Se trata de la aerosolgrafía, una técnica de origen mexicano, que, aunque es parecida al graffiti, porque se utiliza pintura en aerosol, tiene sus características. La aerosolgrafía es un método de arte donde por lo general se pintan paisajes de sueño, mundos de fantasía y hasta sitios tan lejanos como el espacio, mientras que el graffiti es un modo de pintura o arte visual callejero que se realiza generalmente en superficies amplias de espacios urbanos.
En la aerosolgrafía hay rapidez: cuanto menos se demore el artista con su cuadro, más impacta y gusta a los espectadores.
