¡La tapa del coco! Cortizo, Carrizo y Varela viven en Narnia: Realizando Metas
Afirman que este gobierno ha demostrado ser solo una copia al carbón de su antecesor, generando crisis económica, social e institucional, aumentando el desempleo, el costo de la vida y la inseguridad.
Panamá enfrenta una profunda crisis económica, social e institucional. La génesis no está en la pandemia de COVID-19, sino en la desastrosa administración encabezada por el expresidente Juan Carlos Varela, quien en su afán enfermizo de perseguir y tratar de destruir al expresidente Ricardo Martinelli, destruyó nuestra economía y la institucionalidad del país al manipular la justicia para saciar su absurda sed de venganza; un gobierno que cometió el pecado de paralizar las obras y programas dirigidos a mejorarle la calidad de vida del pueblo, como la Ciudad Hospitalaria, que en medio de la actual crisis de salud, habría salvado la vida de miles de panameños.
Ante el desastre causado por Varela y su gestión, las expectativas del pueblo panameño frente al nuevo gobierno de Laurentino Cortizo, en el 2019 fueron elevadamente positivas. Sin embargo, la administración Cortizo-Carrizo, lejos de solucionar los graves problemas del país los ha incrementado, teniendo en la actualidad un gobierno indolente frente a las realidades sociales que atraviesan miles de familias, incapaz de generar las soluciones que los panameños necesitan y totalmente carente de credibilidad.
Tras concluir dos años de gobierno, este 1 de julio de 2021, la percepción del pueblo es que en el gobierno Cortizo-Carrizo, sigue la misma agenda elitista y perseguidora de Juan Carlos Varela. Este gobierno ha demostrado ser solo una copia al carbón de su antecesor, generando crisis económica, social e institucional, aumentando el desempleo, el costo de la vida y la inseguridad.
Esta situación se agrava por la crisis institucional por la evidente manipulación de la justicia en contra de Ricardo Martinelli y por la pérdida de credibilidad generada entre otras cosas, por las cuestionadas compras de insumos, medicamentos y equipos para enfrentar la pandemia. El gobierno no ha hecho más que recordarnos las recomendaciones del expresidente Endara de cambiar todas las cerraduras de la Presidencia, para que el PRD nunca más volviera a entrar.
Realizando Metas y su líder Ricardo Martinelli han insistido, desde el primer día, sobre la necesidad de impulsar y lograr un “Acuerdo Nacional”, el cual no puede ser visto entre políticos para resolver sus problemas y repartirse los puestos en el gobierno.
El “Acuerdo Nacional” que propone Realizando Metas y Ricardo Martinelli es un acuerdo entre todos los actores sociales de Panamá para solucionar los problemas de los panameños; lamentablemente, el gobierno Cortizo-Carrizo desconoció este llamado responsable y continuó la agenda del “Varelismo” basado en la persecución política y en beneficio de sus donantes de campaña.
El gobierno se encuentra desenfocado en sus prioridades y en lugar de preocuparse por resolverle los graves problemas a los panameños, el actual Ministro de la Presidencia, José Gabriel Carrizo, se encuentra en una abierta campaña política desatendiendo su función y, a través de altos personeros del gobierno, enfila su persecución política contra el líder de Realizando Metas, Ricardo Martinelli, quien en la actualidad sostiene, desde hace meses, una popularidad en la intención del voto que supera el 60 %.
A tres años de las elecciones, el pueblo no quiere más excusas quiere respuestas a sus problemas; hoy el Presidente de la República, Laurentino Cortizo repite el mismo discurso ya escuchado de promesas, más promesas y excusas. Sin hoja de ruta no hay destino cierto y sin voluntad política no hay futuro para un país.
El informe a la nación del gobierno Cortizo-Carrizo nos recordó lo que hacía el expresidente Juan Carlos Varela: un informe que se refería al país de la fantasía, ajeno a la realidad que vive el pueblo panameño.
El Partido Realizando Metas, liderado por Ricardo Martinelli, ha demostrado, desde el día 1, ser la única fuerza opositora con la que cuenta el pueblo panameño para enfrentar a quienes le quitan la esperanza de mejores días para Panamá. Por ello, una vez más, dispuestos a asumir las consecuencias de izar la bandera de la oposición y mantenernos del lado de los mejores intereses del pueblo panameño, estamos listos para ser el contrapeso que frene las arbitrariedades de este gobierno.
El pueblo panameño sabe que Ricardo Martinelli está dispuesto a luchar un round más al ser la única persona que tiene la capacidad probada para recuperar la economía, generar empleos y devolverle a la gente las oportunidades de hacer sus sueños realidad, tal como lo hizo durante su administración.