Familias afectadas por las inundaciones del pasado 9 y 10 de noviembre en sectores de la provincia de Herrera, recibieron atención médica, orientación, donaciones, mientras equipo pesado se mantiene tratando de recuperar los más de 50 caminos afectados, principalmente en tierras altas de la provincia.
Luego que las condiciones del tiempo empezaron a mejorar, las áreas afectadas por derrumbes, fueron atendidas a través de maquinaria pesada, principalmente en los distritos de Las Minas y Los Pozos.
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El gobernador de la provincia, Víctor Roca, indicó que debido a la gran cantidad de puntos, hay sitios a los cuales no se ha podido llegar, a pesar de un arduo trabajo desde que inició la emergencia.
Este lunes, desde tempranas horas, se logró atender la ruta principal de Loma del Ranchito, en el corregimiento de El Ciprián en Las Minas, área de difícil acceso donde se dieron serias afectaciones por las fuertes lluvias, y que finalmente se logró habilitar para el tránsito de vehículos.
En otro sector afectado, Las Cabras, en el distrito de Pesé, las familias afectadas fueron orientadas por parte del personal de Salud, ante la aparición de alergias y afectaciones en la piel, producto del contacto con lodo y el agua al tratar de salir de sus residencias.
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Alicia Cruz, quien residente en el sector cerca al río, indicó que el río subió de repente, por lo que tuvieron que salir y abandonar todos sus enseres, que terminaron afectados.
“Fue algo muy grande y serio lo que sucedió en mi casa, la mayoría de la gente perdió todo”, indicó la moradora.
En el sitio, el agua les llegó más arriba de la cintura a los adultos, mientras que animales murieron y los electrodomésticos, enseres y alimentos simplemente se perdieron.
Tras las evaluaciones, las autoridades han logrado entregar colchones, kits de limpieza y alimentos a la mayoría de las personas afectadas en los distritos de Pesé y Chitré, donde lastimosamente perdieron el esfuerzo de muchos años.
