El abogado litigante Benito Mojica advirtió que en la investigación por la desaparición de la niña Aderlyn Llerena Saldaña, desde septiembre de 2022, se han cometido varios errores por parte de las autoridades.
Su punto de vista, lo afirma con conocimiento de causa, ya que sucedió algo similar en el desarrollo de la investigación por la muerte de la joven Vanessa Márquez, quien fue encontrada muerta en un terreno cercano al hotel Plaza Paitilla Inn, aquel 5 de marzo de 2005, es decir, hace 18 años.
Por este caso nunca se supo quién la mató. Hubo algunas destituciones de funcionarios, pero la investigación sobre quién le quitó la vida a esta joven, quedó en un limbo jurídico.
Mojica se encargó de este caso, representando a los familiares de Márquez y la experiencia le indica que se está incursionando en una práctica donde posiblemente no habrá resultados. Ante esta situación recomienda a la familia de Aderlyn actuar con tiempo para que no se cierre la investigación.
Hay responsabilidades severas y serias. Y es que el Artículo 220, numeral 4 de la Constitución Nacional autoriza al Ministerio Público a perseguir el delito. En tanto, el Artículo 273 del nuevo Código Procesal Penal, entre otros, también permite que se desarrolle una actividad investigativa para encontrar los procesos para la acreditación de un delito y luego la vinculación con la persona que lo cometió.
Es por eso, que a su criterio, la familia tiene que constituirse como querellante coadyuvante mediante un abogado, pues la investigación se inició de oficio.
De esta manera, la familia podría estar más al tanto del proceso con el Ministerio Público, ya que se han cometido varios errores. Por ejemplo, citó que no se recogieron todos indicios del área donde la menor de edad desapareció y posteriormente se actúa por presión de la familia. Aquí se vislumbra una negligencia inexcusable por parte de la entidad; es decir que el fiscal que lleva la causa puede ser investigado y querellado.
"Es una falta de consideración y de respeto con esta madre. Puede que como ella lo indicó, en el momento se encontraban los indicios para dar con el responsable y recuperar a la niña, pero no fue así. Ahora se habla de elementos captados en una cámara de videovigilancia [como se ha divulgado en los medios de comunicación] y se hecho una recreación", acotó el popular "abogado del diablo".
Mojica recalcó que el fiscal es el investigador y es quien está autorizado a practicar las diligencias para luego ponerlas en manos de un juez de garantías. No tiene que pedirle permiso, pues se trata de una urgencia.
Otra falla en el caso de Aderlyn es el uso de la tecnología. A estas alturas se debería tener un desglose de la prueba de luminol, con los segundos, microsegundo y nanosegundos del momento exacto de lo que captó la cámara de videovigilancia y estas evidencias debieron ser analizadas por el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Todo eso debió estar detallado, pues hoy día se puede rastrear a una persona desde su ubicación por GPS.
Por otro lado, se han realizado diligencias sin resultados, cuando desde un principio el Ministerio Público pudo usar sus brazos auxiliares en la investigación de campo y peinar toda el área donde ocurrió la desaparición, además de hacer entrevistas con familiares, vecinos, amigos, docentes y otros allegados.
"El fiscal se tiene que convertir en un investigador, no un fiscal sentado ante su escritorio, luego pedir la carpeta con el archivo provisional y utilizar falacias como que no se han encontrado elementos suficientes para continuar con la investigación", sostuvo el procesalista y penalista.
Aclaró que la Policía Nacional solo ejecuta una orden del Ministerio Público en la investigación y no le corresponde actuar por cuenta propia.
"El abogado del diablo" recordó que en el caso de Vanessa Márquez hubo diligencias sin resultados y se omitieron muchos pasos. Agregó que la joven presentaba quemaduras con cigarrillos en su cuerpo, hubo golpes y otros elementos que nunca constaron en el expediente.
También dijo que lamentablemente solo se sucitó la destitución de servidores públicos y el caso quedó en un limbo jurídico, que no debe pasar con el Sistema Penal Acusatorio (SPA), que es garantista y que tiene toda la tecnología de la mano.
Otra de las fallas que notó es que se ha informado que fue la mamá de Aderlyn, quien solicitó el cierre del aeropuerto y fronteras, pues no se había hecho para crear un cerco investigativo. Y pasó igual con las cámaras, se dijo desde un principio, pero luego de cinco meses es que se actúa.
Ante este escenario, el abogado litigante recordó que el actuar del Ministerio Público es como la teoría de la ardilla y lo definió en los siguientes términos: "Animal que salta de rama en rama, quema calorías y no ha hecho nada".
Es por es que mencionó que le gustaría escuchar la posición del fiscal donde explique hasta dónde llegaron y por qué llegaron hasta allí.
Concluyó que esta experiencia con Aderlyn no se puede quedar como el caso Vanessa Márquez, cuya muerte quedó en el anonimato y el silencio.
"La carga de ese silencio está en dos personas, quien ejecutó el acto y en quien tenía que investigar. Hago un llamado al procurador, Javier Caraballo, que examine la conducta del fiscal que lleva este caso, pues se trata de una niña, una compatriota que hoy puede ser ella, pero que es una situación que le puede suceder a una hermana, hija, sobrina, etc, pero hay un deber de investigar su desaparición y tiene igual responsabilidad quien investiga así como quien ejecuta el acto", recalco.