'No tengo respuestas, no sé qué hacer'... Elizabeth clama por ayuda médica en La Chorrera y solo recibe el silencio
Este medio presentó el caso hace ocho días a las autoridades del Ministerio de Salud y a la fecha no ha habido ningún pronunciamiento.
La señora Elizabeth Díaz, de 45 años de edad, se encuentra en una gran encrucijada. Le preocupa su salud. Ella ha tocado puertas, pero no le dan luces.
Ella reside en Rincón Solano N. 2 de La Chorrera, provincia de Panamá Oeste. Su casa se ubica entre la calle Los Naranjos y calle El Esfuerzo, donde los vecinos conocen de su caso.
Contó que el 14 de octubre de 2016 fue operada por una diverticulosis, que posteriormente se rompió y de allí en adelante ha quedado utilizando una bolsa de ostomía (una abertura quirúrgica que se hace en la piel cuando un problema no permite que una parte del cuerpo funcione bien).
De aquel incidente, ya han pasado seis años. Esta fémina ha sido atendida en el Hospital Santo Tomás, donde se pudo realizar algunas revisiones médicas.
En este lapso ha tocado puertas, entre ellas, al representante del corregimiento, a quien ha pedido ayuda para conseguir sus bolsas. También ha solicitado ayuda al Municipio de La Chorrera. No obstante, la respuesta que le han dado es que "no hay presupuesto".
Elizabeth manifestó que actualmente necesita realizarse una espirometría, placa de tórax, electrocardiograma, exámenes de sagre, además de ser evaluada por un neumólogo y un cardiólogo.
Desafortunadamente en el Hospital Santo Tomás y en el Hospital Regional Nicolás A. Solano, en La Chorrera, le han indicado que no hay cita. Su salud sigue en juego.
"En estos momentos siento mucho dolor. En urgencias del Nicolás Solano me dicen que no, que hay mucho virus", esa es la excusa.
La última vez que acudió al Hospital de La Chorrera fue el pasado 22 de enero, pues presentaba dolor en su cuerpo, tenía un cuadro de diarrea, dolor de cabeza, fiebre y mucho dolor en su cuerpo.
También le comentaron que si la pasaban con un neumólogo, solo sería para un chequeo más no un seguimiento a su condición, pues solo el servicio era por una urgencia y estos especialistas son escasos.
"No tengo respuestas, no sé qué hacer", narró la paciente.
El entorno de Elizabeth
Esta mujer no cuenta con el beneficio de un seguro social y de ella depende un hijo. Por el momento recibe el Vale Digital. También, con el apoyo de algunas personas que conocen su caso le donan para comprar los medicamentos y la comida cuando escasea.
Su casa es bloques y no ha sido repellada. Es una vivienda de dos cuartos, uno lo usa para dormir y el otro funciona como sala y cocina. Allí no se dispone de baño ni servicio higiénico.
Su pareja actualmente está desempleada y depende de algún "camarón" que salga. La desesperación de Elizabeth y su familia se agudiza con el pasar de los días.
Este medio expuso el caso ante las autoridades del Ministerio de Salud, tanto en la sede principal de la entidad, así como en la provincia de Panamá Oeste, pero no dieron respuesta.
A ellos se les suministró toda la documentación sobre los exámenes y atención médica que amerita esta paciente. Luego de ocho días de haber presentado la documentación y el caso de Elizabeth... hasta el silencio de las autoridades sigue imperando.