Panamá registró 6 muertes más por el COVID-19 que elevan a 126 defunciones, y sumó 194 nuevos casos para llegar a un acumulado de 4.467 contagios confirmados, informaron este domingo las autoridades sanitarias.
En aislamiento domiciliar se encuentran 3.819 pacientes, de los que 908 están ingresados en hoteles que temporalmente hacen las veces de hospitales.
Una cantidad de 357 enfermos están hospitalizados, 259 en sala y 98 en las unidades de cuidados intensivos (UCI) a nivel nacional.
Entre los que se han recuperado epidemiológicamente tras serle realizadas pruebas de laboratorio se cuentan 165, mientras que 1.809 se restablecieron clínicamente luego de cumplir con el confinamiento y no tener ya síntomas, para un total de 1.974 curados.
Se han efectuado 20.137 pruebas de detección de contagio por el nuevo coronavirus COVID-19, el 76,4 % negativas (15.384) y el 23,6 % positivas (4.753), las cuales incluyen primeras y segundas muestras para confirmar el contagio.
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Sigue la cuarentena nacional
La directora de Epidemiología del Ministerio de Salud (Minsa), Lourdes Moreno, explicó que las pruebas por millón de habitantes ascienden a 4.706, con 1.046 muestras realizadas en las últimas 24 horas.
Moreno indicó que en los pacientes con más de 60 años de edad se siguen concentrando las defunciones con 96, mientras que el segmento de personas de entre 40 a 59 años registran a la fecha 23 muertes.
Las autoridades también dijeron que el toque de queda como la cuarentena nacional indefinida y las medidas de restricción de la movilidad se mantienen, con limitaciones en razón de genero que reducen las salidas para las compras de medicinas y alimentos.
El ministro de Seguridad, Juan Pino, señaló que algunas personas siguen incumpliendo el toque de queda y la medida de quedarse en casa para contener la propagación del virus, por lo cual en las últimas fueron detenidos 436 ciudadanos, entre ellos 380 hombres, 29 mujeres y 27 menores de edad.
La cuarentena permite a un sector de la población salir a trabajar con salvoconductos en sectores básicos como salud, alimentación, transporte, comunicaciones, entre otros, mientras que están cerrados desde la segunda semana de marzo los comercios e industrias no esenciales y las escuelas.