Desde hace dos años, los niños que viven en Las 600, ubicada en el corregimiento de José Domingo Espinar, en San Miguelito, no recuerdan cuándo fue la última vez que vieron su parque limpio y sus columpios arreglados.
Josué Rodríguez, de siete años, le preguntó a su mamá que por qué si viven tan cerca no podía jugar dentro de su parquecito.
Desde que uno se acerca al parque se observa la estructura oxidada y el monte arropando parte de sus columpios.
Los residentes solo piden que lo arreglen para que sus hijos jueguen tranquilamente.