- Inés Sánchez resultó herida y fue intervenida quirúrgicamente en el Nicolás Solano.
Cuatro personas perdieron la vida antes de que llegara la Nochebuena en el sector oeste, tres de ellas de manera violenta y un desnucado, dejando luto y dolor en la familia panameña.
En Nueva Gorgona, distrito de Chame, Alberto Quirós, de 43 años, quien según las primeras versiones cuidaba una finca en el lugar, de propiedad de unos hermanos apellido Álvarez, resultó calcinado a raíz de un fuego que se produjo en una casita de zinc donde vivía.
Versiones indican que uno de los dueños de la finca llegó el 24 de diciembre a buscar a Quirós, con la intención de que le ayudara a recoger guandú, pero al arribar al sitio donde estaba la casita, esta se había caído y estaba entre algunos escombros, y cuando levantaron una hoja de zinc, dieron con el cuerpo del hombre.
La pequeña casita no tenía luz eléctrica, por lo que Alberto se alumbraba con una lámpara de querosín, por lo que esta pudo ser la causa del incendio.
Entre tanto, en Playa Leona, Dany Santamaría, de 40 años, quien acababa de salir en su carro el día 24, aproximadamente a las 8 de la noche, acompañado de su madre Inés Sánchez, fue interceptado por varios sujetos que le dispararon, causándole la muerte en forma instantánea.
La señora Inés también resultó herida, por lo que fue conducida inmediatamente a urgencias del hospital Nicolás Solano, en donde fue intervenida quirúrgicamente, ya que presentaba heridas en el abdomen y en las piernas. Ayer, la señora Inés se encontraba en recuperación.
Por su parte, el niño Thyller Adames Santos, de apenas año y tres meses de nacido, fue atropellado por un autobús de la ruta Arraiján-Panamá en la comunidad de Vista Bella, en el distrito de Arraiján.
El hecho ocurrió aproximadamente a las 11 de la mañana del martes, cuando Vicente Santos, abuelo del infante, sin percatarse que Thyller lo seguía, cruzó la calle ubicada frente a la escuela del lugar. Al darse cuenta que Thyller corría tras él, el abuelo hizo señas al conductor del autobús para que frenara, lo que no fue advertido por este, que arrolló al infante con las llantas traseras, dejándolo inerte.
Mientras que, ayer, Javier Adames, de 24 años, cayó en un barranco, en la comunidad 13 de Febrero, en Burunga, distrito de Arraiján, y falleció, aparentemente desnucado. Los familiares de Adames manifestaron que este había estado tomando licor la noche del 24 y no fue sino hasta ayer, después de las 11 a.m., cuando se percataron de que estaba sin vida al lado de una escalera que conduce a su residencia.