Al mejor estilo del oeste, un cabo primero de la Policía Nacional (PN) se enfrentó a tiros con cinco delincuentes, el pasado 29 de septiembre.
Según informes policiales, estos habían robado en la Frutería Mimi en Carrasquilla. El uniformado, a quien se le ocultará su identidad, por seguridad, narró a día a día, que lo primero que pasó por su mente era que en algún momento pudiera ser impactado, pues sus agresores no le tenían miedo.
Aquel día, el policía estaba cerca del lugar, porque había hecho una parada para comprar unos medicamentos en el Súper 99, ya que se sentía mal, cuando escuchó los comentarios del robo. Astutamente se metió por una de las calles para sorprender a los antisociales frente al restaurante El Novillo en donde se dieron los intercambios de balas.
Desesperadamente, pedía apoyo, este llegó en unos diez minutos, pero aun así, el valeroso policía, con total control de la situación, persuadió a los cinco hombres, quienes se mantuvieron dentro del carro.
Uno de ellos le disparó y, por fortuna, no logró herirlo. El policía respondió y logró impactarlo cerca del pecho; aunque el delincuente huyó del sitio, fue recapturado unas cuadras más adelante.
Este policía, junto a la mayor Deyka Navarro, el sargento segundo Fernando Alonso y los agentes Darío Santos y Raúl Castillo, quienes días atrás salvaron a un bebé que estaba en una letrina, fueron reconocidos por el valor y sacrificio de su profesión. También el joven Abdiel Rodríguez, de 17 años de edad, quien ayudó en el rescate, fue exaltado.
El director de la PN, Omar Pinzón, dijo sentirse satisfecho por el actuar comprometido de los funcionarios de la institución.
Valentía policial
La hazaña del cabo primero es lo que le permitió contarla.
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Jean carlos díaz
- @jeandiaz1331