La obra es impulsada por la Fundación Amador y cuenta con el apoyo científico del Instituto Smithsonian y de la Universidad de Panamá, el mismo está valorado en 94 millones de dólares (73,7 millones de euros), pero aún falta por culminar otras tres galerías y completar las ocho estaciones del parque temático que rodea la instalación.
El diseño lo hizo el arquitecto Frank Gehry, autor del Museo Guggenheim de Bilbao, pieza reconocida por la inigualable revalorización del centro urbano de esa ciudad.
"La esperada inauguración del Biomuseo se da hoy con una concurrida asistencia en sus instalaciones", dijo una fuente oficial de la conocida obra panameña.I
La intención de la obra es cambiar cómo vemos, entendemos y conservamos nuestro ambiente. Panamá, debido a su compleja historia y gran concentración de especies, se ha convertido en un laboratorio para el estudio de la evolución de la vida.
El Biomuseo va a estar ubicado justo en la entrada del Pacífico del Canal en la Calzada de Amador. La inauguración al público contará inicialmente con 5 de las 8 galerías.
Especificaciones del edificio:
El museo, de 4,000 metros cuadrados, contiene ocho galerías de exhibición permanente, diseñadas en secuencia por Bruce Mau Design.
Sus instalaciones cuentan con un atrio público, un espacio para exhibiciones temporales, tienda, cafetería y exhibiciones exteriores múltiples localizadas en un parque botánico diseñado por la paisajista Edwina von Gal.
Su impacto visual y físico sirve para transmitir el concepto primario de cada sala, provocando a la vez en los visitantes la sensación de estar en presencia de algo prodigioso. En cada una de las ocho galerías del museo, el espacio y el contenido forman un todo que sirve como metáfora para la comunicación de una idea fundamental.
El visitante podrá conocer más sobre Panamá y su compleja biodiversidad a través de las siguientes galerías:
Galería de la biodiversidad:
Existe una increíble abundancia y variedad de vida en la Tierra. Una rampa dará la bienvenida al visitante al mundo de la ciencia natural y a la explosión de vida en Panamá.
Panamarama:
Estamos rodeados por un sinfín de seres y comunidades vivientes. Un espacio de proyección de tres alturas y diez pantallas sumergirá al visitante en una presentación audiovisual de las maravillas naturales de Panamá.
El puente surge:
Panamá es un milagro que surgió del mar hace solo tres millones de años. Las fuerzas del interior de la Tierra que formaron el istmo se presentarán con tres esculturas tectónicas de catorce metros de altura, en un espacio de encuentro táctil y físico con el mundo geológico.
El gran intercambio:
Cuando el istmo se cerró, se produjo un gran intercambio de especies entre Norte y Sudamérica. Una estampida de esculturas de animales de todas épocas, formas y tamaños contará este evento único en la naturaleza que aún continúa.
La huella humana:
Los seres humanos somos parte integral de la naturaleza. En un espacio abierto parcialmente al aire libre, dieciséis columnas contarán la historia de la presencia humana en el istmo y sus interacciones con los escenarios naturales de Panamá a lo largo del tiempo.
Océanos divididos:
Cuando Panamá emergió, dos océanos muy diferentes se formaron, cambiando la vida en toda la Tierra. Dos acuarios semicilíndricos de gran altura mostrarán cómo el Pacífico y el Caribe evolucionaron al quedar separados por la creación del istmo.
La red viviente:
Los seres vivos se necesitan mutuamente e interactúan de maneras complejas e invisibles. Una enorme escultura, a la vez planta, animal, insecto y microorganismo producirá en el visitante el efecto de estar en una dimensión donde todas las criaturas tienen la misma importancia.
Panamá es el museo:
Las cosas más asombrosas esperan al visitante afuera del museo. Paneles y pantallas ofrecerán información sobre las relaciones entre la biodiversidad de Panamá y el mundo, y acceso a una red virtual que vinculará al museo con el resto del planeta.
LA FUNDACIÓN AMADOR
La Fundación Amador es una organización sin fines de lucro, conformada por un grupo de miembros distinguidos de la comunidad panameña, cuyo objetivo es el desarrollo de un centro tropical de biodiversidad en el área de Amador, abierto a todos los habitantes del mundo.
El proyecto cuenta también con el apoyo incondicional de la Fundación Amador e instituciones científicas y culturales más prestigiosas del mundo: el Instituto Smithsonian que es el que estudia los ambientes terrestres y marinos en Panamá durante más de 100 años, con extraordinarios resultados.