El jefe de misión de la Embajada de EE.UU. en Panamá Stewart Tuttle visitó el albergue de Lajas Blancas para conversar con migrantes y con el personal de organizaciones internacionales, que les atienden.
En este año fiscal, el gobierno de Estados Unidos destinó aproximadamente $16 millones para asistencia humanitaria de refugiados y migrantes vulnerables en Panamá.
La cifra fue casi cuatro veces más que el monto que Panamá recibió en 2021 ($4 millones). Estos fondos son entregados a organizaciones internacionales que tienen programas de asistencia humanitaria en Panamá, como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, UNICEF, la Organización Internacional para las Migraciones, y la Fundación Panamericana para el Desarrollo.
“El nivel de entrega del equipo de las organizaciones internacionales en Darién es conmovedor y admirable. Como representante del gobierno de Estados Unidos, agradezco inmensamente su trabajo diario para atender a los migrantes. Nos reconforta poder apoyar los esfuerzos del gobierno de Panamá a través del trabajo de estas organizaciones”, comentó el jefe de misión durante su visita.
Estas organizaciones, con el financiamiento de EE.UU., proveen servicios de salud a los migrantes, como atención primaria y de emergencias, salud materno-infantil y mental. Esto incluye tratamiento para la deshidratación, diarrea, infecciones urinarias, lesiones y experiencias traumáticas. Además, ofrecen medicamentos e insumos médicos al Ministerio de Salud, y productos de higiene personal, ropa y calzado a los migrantes.
Con fondos de EE.UU., estas organizaciones han optimizado las instalaciones de los albergues migratorios y las comunidades de acogida con carpas para proteger a las personas del clima, luminarias, letrinas y sistemas de suministro de agua. También se ha capacitado a los estamentos de seguridad panameños y a líderes comunitarios en la prevención de crímenes y en atención humanitaria. Además, se ofrece asistencia para la protección de los menores que viajan solos, entre muchas otras acciones en el manejo de la migración irregular en Panamá.
“He escuchado de los propios migrantes lo peligroso, traumático y mortal que es cruzar la selva del Darién, donde se enfrentan a situaciones inhumanas que nunca pensaron vivir. Les animo a no hacer este peligroso viaje, y a buscar maneras seguras y legales para migrar”, expresó el jefe de misión, Stewart Tuttle.
A partir del 20 de octubre de 2022, los venezolanos que crucen la frontera de Colombia y Panamá de manera irregular no serán elegibles para el nuevo programa migratorio, el proceso para venezolanos, que permite a los nacionales venezolanos y sus familiares inmediatos venir a Estados Unidos. Para más información sobre el programa visite: https://www.uscis.gov/es/venezuela .