No corren buenos tiempos para Zayn Malik. El cantante protagonizaba una de las mayores polémicas a finales del año pasado tras haber sido denunciado por agresión por su exsuegra, Yolanda, madre de Gigi Hadid.
Al parecer, tuvieron una fuerte discusión motivada por la publicación por parte de la mujer de una foto en la que se veía la cara de su hija, Khai, algo que a Zayn no le hizo ni pizca de gracia. De los insultos pasaron a un empujón que hizo que Yolanda Hadid se golpease contra un armario y sufriese pequeñas lesiones. Ante estos hechos, el cantante fue condenado a 360 días de libertad condicional, acudir a un programa de violencia doméstica y control de ira, además de la prohibición de poder tener ningún contacto con la madre de su expareja.
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El británico comienza el año bajo las acusaciones de infidelidad que una presunta antigua amante, la modelo Abi Clarke, protagonista del reality británico The Only Way is Essex (TOWIE), que ha contado a sus allegados cómo de apasionada era su relación con el artista, la cual mantuvo mientras estaba con Gigi.
Según su confidente revela al diario The Sun, el cantante habría mantenido una aventura amorosa con la influencer, a la que conoció en un bar en Los Ángeles. Sin embargo, uno de los motivos que le habrían llevado al cantante a engañar a su pareja, según Clarke, es que ella se parecía a la ex del artista, la cantante Perrie Edwards, del grupo Little Mix, con quien estuvo comprometido durante dos años y cuya complicada ruptura aún tendría sus consecuencias.
