El espectáculo de Rihanna durante el descanso de la Super Bowl ha generado numerosos titulares. Principalmente, por el anuncio de su segundo embarazo durante el show, pero también otros que no han sido tan bien recibidos por los espectadores.
La Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos ha recibido más de 100 quejas de espectadores de todo el país considerando que la actuación fue demasiado sexual.
"Toques y movimientos de baile inapropiados, muy obscenos para que los vea una familia. Los niños pequeños no necesitan ver esto”, se puede leer en una de las quejas de una persona de Rockton, Illinois, mientras que otra directamente definía la actuación como "enferma".
Otras críticas se habla de "agarre de genitales" y "olfateo de sus dedos"; "así como agarraron sus traseros". Pero no solo han criticado los movimientos de Rihanna, su equipo de bailarines también han sido criticados por coreografías escenas, especialmente por los bailes de twerk.
"Amigos y familiares se reúnen para ver la Super Bowl. Por qué seguimos teniendo ruido negro año tras año. No pueden cantar ni escribir música de descenso. Todo lo que oí fue "negro, negro, negro" y "baja en mí" o "baja en ti. No considero esto música y no quiero verla a ella y a sus bailarines agarrando su entrepierna en la televisión nacional. La NFL debería avergonzarse de lo que ha convertido en su actuación en el intermedio", lamentaba otro ciudadano de Nueva York, con un claro tono racista.
“Si fuera a un lugar donde hubiera niños e hiciera estos mismos movimientos, probablemente me arrestarían. Por lo tanto, no veo cómo es justo que suceda en televisión en contra de nuestra voluntad y sin previo aviso. Bastante enfadado de que sigan permitiendo cosas así", rezaba otra de las quejas.