La caída del cabello es inevitable. La calvicie es un problema capilar que afecta a millones de hombres, aunque te llames Robbie Williams. El cantante británico de 48 años ha declarado que ha decidido “aceptar” plenamente su pérdida de cabello.
El martes 2 de agosto, la estrella británica del pop fue invitada al programa de radio de Zoe Ball en la BBC. Al tratar el tema de su situación capilar, dijo: “No puedo tomar pastillas porque me deprimen. Voy a tener que aceptar a un Robbie Williams que pierde pelo”.
También explicó que “su pelo es cada vez más fino”, por lo que los médicos se niegan ahora a realizarle trasplantes capilares: “Nadie me quiere hacer un injerto capilar porque dicen que mi pelo se ha vuelto demasiado fino”.
La batalla de Robbie Williams contra la calvicie no es nueva. Tras dos trasplantes de pelo en 2013 y 2020, también ha probado otro tipo de tratamiento muy caro con inyecciones. Una vez más, sin éxito.
“Me puse unas inyecciones. Me costó una fortuna ponerme dos viales. Costó lo mismo que la casa de mi abuela. Me pusieron estas inyecciones y dijeron que en cinco meses mi pelo volvería a crecer mucho más grueso. No pasó nada”, dijo en una entrevista en la radio australiana que fue recogida por The Sun en enero.
La opción de llevar peluquín en las giras
Robbie Williams, que ya ha confesado estar “obsesionado” con su problema de pérdida de cabello, también reveló en esta entrevista en la BBC que estaba considerando usar un peluquín.
“He pensado en usar peluquines. Ahora hacen unas pelucas geniales; tienes que afeitarte todo el pelo, luego te la pones con pegamento y te aguanta varias semanas”, dijo.
“En realidad, podría hacerlo solo para las giras”, añade Robbie Williams. De hecho, parece que al cantante se le ocurrió en el escenario. “Cuando estoy en el escenario y me hacen un primer plano, les miro como si todavía tuviera 27 años. Luego me doy la vuelta y veo una versión de mí con tres papadas y con un redondel brillando en la parte superior de mi cabeza, que parece el cu... de un bebé”.