La cuarta temporada de la serie "Stranger Things" ha contado con los esperados regresos de varios personajes queridos como Max (Sadie Sink), Once (Millie Bobby Brown), Dustin (Gaten Matarazzo) o Steve (Joe Keery). Pero también ha preparado el terreno para la introduccción de nuevos personajes que se han convertido en los nuevos favoritos de muchas personas, como es el caso de Eddie Munson, interpretado por Joseph Quinn.
Munson es el líder del Club Fuego Infernal formado por un grupo de adolescentes que se unen para jugar a Dragones y Mazmorras. Su aspecto metalero y su pasión por este juego de mesa ha hecho que se le considere en el instituto como un friki y un 'monstruo'. Y más aún cuando es el único testigo de la muerte de Chrissy (Grace Van Dien) y perseguido por la policía por ello.
Pero lo más sorprendente de este personaje es que está basado en hechos reales, concretamente en un caso que ocurrió durante el pánico que invadió la región sur de los Estados Unidos a finales de los 80 y a principios de los 90.
Eddie Munson se basa en la experiencia de Damien Echols, uno de los miembros de West Memphis Three, cuyo caso ha estado en curso durante casi 30 años. Netflix lo ha confirmado recientemente durante la Geeked Week en el que afirma que se basa en esta historia real, que ya ha sido objeto de un documental: Paradise Lost, disponible en HBO Max.
¿Qué pasó en el caso de West Memphys three?
El 5 de mayo de 1993, tres amigos de ocho años llamados Steven Branch, Michael Moore y Christopher Byers desaparecieron en West Memphis, Arkansas. Sus cuerpos fueron encontrados al día siguiente en un bosque cercano. Las víctimas fueron desnudadas y atadas antes de ser arrojadas a un arroyo.
Debido a la naturaleza violenta de estos asesinatos, las sospechas recayeron rápidamente sobre Damien Echols, un adolescente gótico de 18 años que vivía cerca del vecindario donde desaparecieron los niños. En ese momento, había un creciente pánico por el satanismo y Damien no ocultaba su pasión por las bandas de metal y su interés la magia.
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También era ya conocido por la policía, ya que había sido arrestado por robar en varias tiendas y allanamiento de morada, además tenía antecedentes médicos de tratamiento por problemas de salud mental. Charles Jason Baldwin era amigo suyo, pero, a diferencia de Damien, tenía 17 años, muy buenas notas en el instituto y su amor por el arte en general era conocido por todos los vecinos.
Jason y Damien fueron arrestados cuando la policía obtuvo una confesión de un conocido lejano, Jessie Misskelley, un chico de 16 años que fue interrogado durante 12 horas sin supervisión ninguna. Jessie, que tenía un coeficiente intelectual de 72, dijo que estaba con ellos cuando cometieron el crimen e impidió que uno de ellos escapase, aunque realmente no lo hizo. Ni siquiera participó en el asesinato.
Partes de esas declaraciones se filtraron en la prensa incluso antes de que comenzara el juicio. Y aunque no había pruebas de ADN, ninguna conexión con los niños, Jessie cambiaba constantemente la historia e incluso había coartadas que respaldaban la inocencia de los adolescentes, el juicio llegó a ser mediático y presentado como un asesinato ritual de un culto satánico.
Mientras tanto, Damien, Jason y Jessie han seguido manteniendo su inocencia. Algunos de los padres de las víctimas incluso salieron en su defensa. Eventualmente, concretamente en 2011, el trío acordó acogerse a la doctrina Alford que consiste en el que el acusado no reclame ni culpabilidad ni inocencia de los cargos presentados para conseguir una sentencia más baja. Por esta razón, todas sus sentencias se redujeron al tiempo cumplido y finalmente fueron liberados después de 18 años con una sentencia suspendida de 10 años.
Hoy día, rondan los cuarenta y tanto años y Echols cree firmemente en la magia negra y ha escrito libros sobre cómo le salvó la vida cuando estaba en prisión. Baldwin se mudó a Texas, donde cofundó Proclaim Justice, que ayuda a los condenados injustamente. También ha dicho que desde que HBO estrenó el documental Paradise Lost, es probablemente la razón por la que West Memphis Three fue liberado de prisión.
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No se sabe mucho sobre la vida de Misskeley en los años transcurridos desde que fue liberado. En 2017 fue detenido tras una serie de infracciones de tráfico, pero no volvió a prisión. También han surgido informes de que desde entonces ha estado trabajando en la construcción. A pesar de lo que pasaron juntos, los tres no parecen estar en contacto entre sí.