Trato de comprender en lo que ha quedado Calle 7, el "game show" vespertino de pantalla Telemetro.
Trato de comprenderlo y me cuesta creer que la producción ejecutiva y la producción general de este proyecto hayan llevado al "game show" más importante de la televisión local a convertirse en una muy, pero muy vulgar y burda agencia de buscar parejas, por no decir marido y mujer.
Me cuesta comprender que hayan copiado lo peor de su competidor Esto es Guerra de TVN y repliquen tácticas busca "rating" a la que solo recurren quienes no tienen la capacidad de ofrecer contenido tan bueno que uno no quiera dejar de verlo.
Me cuesta comprender y espero así no lo sea- que en el contrato de los participantes de Calle 7 haya alguna cláusula que dice tienen que salir de ahí con parejas, vender o promocionar sus calenturas hormonales en televisión nacional, redes sociales oficiales o en cualquier espacio con la marca Calle7-Telemetro.
Me cuesta comprender mentira, esto no me cuesta mucho comprenderlo- que algunos participantes tengan músculos y celulitis en el cerebro y por eso no comprenden el terrible papel que están haciendo, sobre todo las damas, en televisión nacional con esa exposición de sus romances.
Uno puede comprender que los tiempos han cambiado y que evidentemente hay público al que le gusta este tipo de contenido morboso y siguen las notas del corazón, -aquí yo le llamaría notas hormonales- pero que pase en Calle7 que desde el día uno se ganó un público por ser un buen producto, es incomprensible.
Es incomprensible que esto pase en Calle 7 porque detrás de esa producción hay un productor con mucho talento. Es incomprensible que eso pase en la pantalla que más valores promociona en su área de responsabilidad social empresarial. Es incomprensible porque están replicando lo mismo que tanto criticaron de sus competidores del 2. Incomprensible
Tan incomprensible como varias cosas que pasaron en la primera gala en directo de "Dale Like a mi Baile".
Yo mantengo lo que escribí la semana pasada en mi crítica a la nueva propuesta estelar de TVN los miércoles en la noche.
"Dale Like a mi Baile" es, gústele a quien le guste, una producción buena y bastante bien lograda como "show" televisivo de entretenimiento familiar. Reitero, está bien presentado por la Sra. Andrea Pérez Meana, pero, su formato puede generar ruidos porque sí, aunque no lo admitan, sí hay desventajas a la hora de las votaciones entre los talentos que son muy populares vs. talentos que son conocidos pero no tienen el alcance en redes que los otros y quedó evidenciado el miércoles.
La producción de "Dale Like a mi Baile" -de antes de ayer- en su primera gala en directo tuvo varios errores de coordinación y, por lo que se vio al aire, proveniente del área de controles y dirección. Eso puede pasar hasta en las megaproducciones de verdad, lo que sí no puede pasar es que el "show" deje dudas desde su inicio en la mecánica de selección de equipos ganadores por su formato.
En este "show" son claves las redes sociales, sobre todo de los participantes. No es lo mismo la popularidad en redes de la Sra. Assilem "La Polla" Delgado que tiene 170 mil seguidores en Instagram que los 38 mil de la Sra. Sara Bello. No es lo mismo los 259 mil que tiene el Sr. Jaime "Bugaman" Chong que los 66 mil que tiene el Sr. Luigi Palacios. Y no, no es culpa de los participantes, es culpa de la producción que no ha buscado una media en la que, los menos seguidos en redes no se vean perjudicados por los más seguidos.
Sí, yo sé que no es un concurso solo de baile, también es de popularidad y precisamente por eso la producción debe buscar un mecanismo, justo, para que gane el que se haga más popular por su buen baile. No es que baile mal y sea muy popular. Y aquí no me refiero a nadie en específico. Si no revisan este punto, todo el esfuerzo por bailar bien y ser bien calificado, es en vano.
Otro punto que la producción tiene que evaluar porque lo que vimos es incongruente es la competencia entre capitanes de equipos. Su competencia debe ser calificada por los "likes" ya sea del público presente en estudio o de redes sociales. Hacerlo como el miércoles donde los del Sinaproc fueron los encargados de decidir quién de los dos capitanes ganó, es descabellado, ilógico y hasta incoherente. Si fuera un "show" de "salvavidas", sería entendible, pero es de baile y gusto de las audiencias. ¿O es un "show" de prevención y emergencias? Cuidado con eso. ¡No Like!
'Yo mantengo lo que escribí la semana pasada en mi crítica a la nueva propuesta estelar de TVN los miércoles en la noche'.