La cantautora panameña Erika Ender es una de las artistas más respetadas, no por nada ha sido galardonada con múltiples premios, no solo por su inigualable trabajo como compositora y cantante sino también por su fundación Puertas Abiertas, que cada año lleva a cabo Talenpro.
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La panameña sigue llenando de luz y positivismo a sus seguidores de redes sociales invitándolos a ser parte de su filosofía de vida y compartiendo ese lado íntimo de lo que la ha llevado a ser quien es hoy: “NO VINE A ESTE MUNDO A COMPETIR, SINO A COMPARTIR... NO ME QUEDO CON NADA, porque de esta vida, nada me llevo... No baso mis metas en bienes materiales... Y sí en lo que perdura más allá de la materia... Mientras más se recibe... Más se da”, comienza su mensaje.
Confiesa que lo que tenga, aprenda y sirva a otros, lo comparte: “Los árboles no comen sus propios frutos... Crecen y se robustecen para tener la satisfacción de alimentar y servir a los demás... Y así debe ser, o al menos eso es lo que más anhelo ser... Una cadena de amor que toque almas... Que mejore vidas... Que construya... Que deje huella...”.
Para Ender esto es al final todo lo que queda y lo único que realmente vale la pena en nuestro paso por la vida.
