Hija de Dorindo Cárdenas compartirá los últimos días de Wendy, su bebé que nació enferma
Yiniva Cárdenas tiene el corazón en pedazos; no quiere dejar ir a su ternera.
Para algunos esto es una "awebasón". Es un ternero, un animal que se come, pero para ella es un ser vivo y al caminar hacia ella en sus primeros días de vida, la eligió como su humana/madre.
Yiniva Cárdenas, hija de Dorindo Cárdenas, está con el corazón hecho pedazos, ya que su bebé ternera nació enferma. Ella ha decidido compartir los últimos días de Wendy o Muñeca. "Hace un mes nos conocimos. Te adopté. En cuanto me viste caminaste con muchísima dificultad, varios metros, hasta llegar a mis piernas. ¡Ojalá hubiese grabado ese momento! Quedará conmigo", explicó Cárdenas. Su ternera se llama Wendy, Muñeca o también La Niña, como le dice una tía. "Mi bebé ha vivido 1 mes conmigo, desde aquel 2 de marzo que la monté en el auto y viajó en mis piernas de Tonosí a Las Tablas. He hecho todo lo humanamente posible para salvarla. Mis rodillas, mi espalda, mis codos y mi corazón, ya no aguantan más, pero lo seguiría haciendo si supiera que tendría una vida digna", destacó. Explicó que este es el segundo mal parto de su madre que no genera leche y poco a poco se ha ido deteriorando. "Sus patitas lentamente dejaron de funcionar y ya no le responden. Sigue viva, porque he visto en sus ojos las ganas de vivir, porque a veces se aploma cuando levanto sus 100 libras con todas las fuerzas que me dan mis brazos, pero creo que todos los expertos que la han atendido, tienen razón: mi niña debe partir", dijo.