Antes de ser llevado a prisión, Pablo Lyle tuvo un último gesto con su familia. El actor se despidió de su esposa, Ana Araujo, su cuñado, Lucas Delfino y más seres queridos, tras haber sido declarado culpable de homicidio involuntario el pasado 4 de octubre.
Desde ese día el actor permanece dentro de una cárcel en Florida, en donde espera que se le dicte sentencia.
La fiscalía ha solicitado una pena para él de 9 años y medio. El dictamen podría conocerse el próximo 14 de noviembre.
La noche del pasado martes 1 de noviembre, su esposa Ana Araujo reapareció en su cuenta de Instagram luego de guardar silencio por casi un mes desde que el actor ingresó a prisión.
Publicó un mantra en el que hizo un llamado al "amor universal". Ella no apareció en las imágenes.
Sin embargo, horas después sí lo hizo. No solo ella, sino también el hijo que tuvo con el actor, Mauro, de 8 años.
Ana Araujo, su hija Arantza (a quien Pablo Lyle también considera como suya) y Mauro fueron invitados a un juego de beisbol de los Venados de Mazatlán.