Luego de que Sandra Sandoval revelara que a los 18 años se había inyectado biopolímeros en las pantorillas, otra que sorprendió ayer con una fuerte revelación fue Ingrid De Ycaza. ¿Cómo?
La "rockstar" compartió en sus historias de Instagram que desde hace aproximadamente cinco años descubrió que padece el síndrome de Ehlers Danlos hiperlaxitud, condición congénita que afecta las articulaciones y hasta la piel. ¡Wao!
La presentadora explicó que no habla mucho de esto, pero hay gente que la ve con los tapes puestos en las rodillas o comparte publicaciones de sus terapias. "Hace poco conocí a una niña que su sueño más grande era conocerme, tiene 15 años y tiene este padecimiento, le da artritis, todo le duele y yo no estoy en ese grado, por lo menos no así, decidí compartirlo", aclaró De Ycaza.
¿Cómo se dio cuenta?
"Ha sido de poco a poco y a raíz de diferentes cosas que me pasan en las articulaciones y la espalda pensé que era por mi flexibilidad y no por una condición y sin querer después de mis stories me enteré que el mes de mayo es el mes de la conciencia sobre el Ehlers Danlos", narró Ingrid.
Según la artista, no todas las personas desarrollan esta condición de la misma forma. "Por lo menos mi hombro izquierdo se sale de la posición y vuelve a su posición normal y eso no me duele, con el derecho nunca lo he intentado, pero con el izquierdo sí... Cuando camino, la rótula de mi rodilla derecha se mueve hacia un lado, por eso me están poniendo los tapes para que se trate de ubicar, ya si tú fortaleces los músculos y tienes las piernas mucho más fuertes, el músculo es el que carga con el trabajo de la articulación y así te friegas menos las rodillas", precisó. A su vez, comentó que la rodilla izquierda la tiene operada desde los 23 años pues "no tengo meniscos, mis meniscos nunca se desarrollaron. Ahorita tengo que fortalecer los músculos de la espalda, no es que me voy a volver fisiculturista, ojo, no se trata de eso sino que el músculo esté fuerte y duro. La mano se me vira un poco más para atrás, o los dedos, eso para mí es normal, natural desde que soy niña, lo fui descubriendo sobre la marcha con diferentes ortopedas que he ido".
Lo pueden heredar
Ingrid afirmó que este síndrome es hereditario y hay veces que las personas no lo descubren nunca, por lo que sus hijos también pueden heredar tal padecimiento. "Esto no se evita y no tiene cura, solo se controla".
En terapias
Ella se mantiene en terapias con fisioterapeutas para controlar la inflamación.
Agregó que tiene que hacer ejercicio con un entrenador personal que sea fisioterapeuta. Es costoso.
Cuenta que la espalda, las rodillas, los tobillos y las muñecas son las partes del cuerpo que más le duelen.