Irene Núñez se volvió a poner su vestido de boda para viajar hasta Colón
Los esposos Gadpaille se fueron hasta Portobelo a realizarse una nueva sesión de fotos con el atuendo de bodas.
¡Esto es amor! Definitivamente que ellos son aventureros, les gusta lo moderno, lo divertido y, por supuesto, que si a ella le gusta algo, él siempre la apoya. ¡De eso se trata un matrimonio!
Lee también: Aquí estamos con el 'día a día Live' de hoy, envíanos tus saludos y comentariosQuiero que sepan que Irene Núñez se volvió a entallar su vestido de boda para realizarse una hermosa sesión de fotos. ¡Ah! Pero si pensaban que solo era era, pues no, Javier Gadpaille, su esposo, también estuvo presente y se entalló su traje de caballero para recordar un día especial.
Mira también: ¡Ay, reculó!, hermano de Sech reconoce su ignorancia sobre el Carnaval tableñoNúñez subió a sus historias de Instagram una serie de videos que hablaban de esta nueva aventura en compañía del fotógrafo.
El sitio escogido para esta sesión fue Portobelo, Colón, en donde ella se metió hasta la playa para lograr una imagen natural y hermosa, que hiciera juego con sus bellos ojos.
En una de las historias destacó que se ponía su vestido de novia por segunda vez para ahora sí destruirlo prácticamente por lo de meterse al mar, pero estamos seguros de que no le pasó nada.
La feliz pareja se casó en la iglesia La Merced del Casco Antiguo hace unas semanas. Irene bailó afuera de la iglesia junto a Javier al ritmo de los congos de Colón.
Ella nos comentó que escogió congos porque no quería empollerarse, quería bailar y quería un concepto que significara mezcla de culturas. Y así fue.
La boda de esta pareja llamó mucho la atención de los seguidores de redes sociales, pues fue totalmente diferente a las bodas que uno está acostumbrado a ver.
Es más, recuerden que el novio viajó desde el Hotel Central, lugar en donde se arregló, hasta la iglesia de La Merced en monopatín con sus caballeros.
La fiesta se realizó en el American Trade Hotel y ella quedó encantada, satisfecha, pero obviamente muy cansada y adolorida de tanto gozar.