Jennifer Garner, casada actualmente con Scott Foley, tuvo que escuchar las duras declaraciones del padre de sus hijos Ben Affleck, en las cuales aseguraba que se sentía "atrapado" en su matrimonio y que eso lo hacía reincidir en su adicción al alcohol: "Me decía: No me puedo ir por mis hijos, pero no soy feliz, ¿qué hago?".
El actor y productor aseguraba que de haberse quedado con Garner seguiría teniendo problemas con el alcohol: "Me sentía atrapado. Es parte del porqué comencé a beber" confesaba Affleck.
Según Affleck, el matrimonio no resultó como ninguno esperaba: "Nuestro matrimonio no funcionó. Es alguien a quien amas y a quien respetas, pero con quien no debías permanecer unido. Al final de cuentas, lo intentamos. Lo intentamos por nuestros hijos". "Ambos pensábamos: Este no es el modelo de matrimonio que queremos que nuestros hijos vean".
Ante estas declaraciones han sido los amigos de la actriz quienes han salido en su defensa: «Esas palabras fueron una bofetada en la cara para ella», contó un amigo de Garner a la publicación 'InTouch'. "Jen no está contenta con lo que dijo Ben sobre el tema de por qué se divorciaron. Ella no habría usado esa frase, ni siquiera habría contado nada. Fue una falta de respeto", añadió la fuente.