Jennifer Lawrence está de estreno. Una de las estrellas de Hollywood más solicitadas llega a la cartelera con su nueva película, Hazme el favor, una comedia en la que también ejerce como productora.
En esta nueva apuesta a la que llega tras el drama Causeway, interpreta a una mujer en apuros económicos que acepta una oferta de empleo de lo más peculiar: ser la acompañante de lujo de un joven muy introvertido (Andrew Barth Feldman) y, de paso, prepararlo un poco antes de entrar en la universidad.
Así, la actriz vuelve a un género, el de la comedia, que domina muy bien. Sin ir más lejos, en 2021 participó en un título que mezclaba humor con drama y ciencia-ficción, firmado por Adam McKay. Un título de Netflix cargado de compañeros estelares como Leonardo DiCaprio.
También se trata de la película en la que la norteamericana ha confesado que se drogó. Hablamos de "No mires arriba", una sátira que narraba cómo el mundo se preparaba ante la llegada de un cometa que posiblemente desencadenaría el apocalipsis.
En la producción reciente del director de La gran apuesta o El vicio del poder, DiCaprio y Lawrence eran dos astrónomos que descubrían que un cometa letal se aproximaba a la Tierra y trataban de alertar al mundo.
En determinada escena, justo después de descubrir el cometa, la científica de Lawrence perdía los nervios por lo que iba a ocurrir y decidía fumar un poco de marihuana para relajarse. La actriz pensó que sería buena idea drogarse de verdad y llevó un porro a la escena.
Tal y como relató McKay durante la promoción del filme, Lawrence pidió permiso para fumarse este porro en una escena con Meryl Streep, que daba vida a la presidenta estadounidense, ya que “su personaje está drogado de verdad” (vía Screen Rant). “Jen dijo: ‘¿Vas a permitirme algo de improvisación?’. Es lo que siempre hacemos. Y yo respondí: ‘Claro, puedes drogarte”, recordó McKay.
Al parecer, el equipo no perdió la oportunidad de burlarse un poco de la actriz en ese estado. “Todo el mundo se metía conmigo, supongo que porque estaba drogada. Era fácil de fastidiar”, aseguró Lawrence entre risas. La actriz también quiso aclarar que aún no estaba embarazada durante el rodaje de esa secuencia.
En No mires arriba, McKay abrazó el humor para, mediante una crisis global, plantear y subrayan diferentes problemáticas políticas, sociales y de actualidad, causando revuelo en redes.