Kim Kardashian perdió más de 7 kilos para enfundarse el vestido de Marilyn Monroe; se lo puso con guantes blancos
La empresaria lució el vestido que usó Marilyn Monroe para cantarle 'Happy Birthday Mr. President' a John F. Kennedy en 1962.
Se llevaba especulando la idea hace algunas semanas y Kim Kardashian no defraudó. La empresaria y estrella de la telerealidad lució en la gala Met la noche del lunes el mismo vestido que Marilyn Monroe usó para cantarle el Happy Birthday Mr. President a John F. Kennedy en 1962.
Kim apareció en la gala de la mano de Pete Davidson, su nueva pareja tras el divorcio de Kayne West, pero todo el protagonismo se lo llevó el icónico vestido que sacó del archivo de la historia de la moda estadounidense, pues hasta ahora había estado expuesto en la franquicia de objetos raros Ripley's Believe It or Not!.
Ese era precisamente el tema de la nueva exposición que acogerá el Museo Metropolitano de Nueva York desde el 7 de mayo al 5 de septiembre de 2022, In America: An Antholofy of Fashion. Y la etiqueta de la cita mandaba "glamour dorado".
Llevar el vestido no solo se convirtió en un problema para Kim para que se lo dejaran, sino que también tenía que caber en él dado que el vestido de Monroe no se podía modificar. Ponerse ese vestido vintage no fue una tarea fácil. "Me lo probé y no me quedaba bien. Entonces dije, 'Dame tres semanas'. Tuve que perder más de 7 kilos para hoy", admitió Kardashian frente a las cámaras.
"Fue todo un desafío. Era como prepararse para un papel de una película. Estaba decidido a encajar en él. No he comido carbohidratos ni azúcar en unas tres semanas. Tendremos una fiesta de pizza y donas en el hotel después de la gala", añadió. Por el momento se desconoce si Kim siguió un régimen supervisado por un profesional médico o nutricionista para esta súbita y casi arriesgada perdida de peso.
Según se dijo en la época de Monroe, el vestido era tan ajustado que tuvo que acabarse y ceñirse a su cuerpo una vez la actriz ya lo llevaba puesto para su actuación en el Madison Square Garden tres meses antes de su muerte. El vestido fue diseñado por el modisto Jean Louis y originalmente costó la friolera de 12.000 dólares de 1962. Pero tras llevarlo Monroe para una cita tan especial esa cifra se multiplicó. En 2016 Ripley compró el vestido en la casa de subastas privada Julien's Auction por 4,81 millones de dólares, lo que lo convirtió en uno de los vestidos más caros del mundo. "Soy una gran aficionada a las subastas y tengo varias piezas de JFK, así que conozco al dueño de Julien's. Él pudo ponerme en contacto [con Ripley's] y así fue como empezó la negociación", dice Kardashian.
Los fans de la estrella de realities ya habían especulado con que Kim podría llevar ese famoso vestido por dos pistas muy concretas que se hicieron públicas días antes. Por un lado, Kim dijo en sus redes sociales que el vestido que luciría en la Met "tenía la talla que tenía" y que no se podía modificar. Por otro, días antes de la gala, se la vio a ella visitar el Ripley's Believe It or Not! de Orlando, Florida, donde se expone el icónico vestido desde 2016.
Reliquia
Guardado en una cámara oscura, controlada a una temperatura óptima de 20 grados y un 40-50% de humedad, el vestido multimillonario rara vez se ha separado de su molde recubierto de muselina, y mucho menos lo ha llevado otra persona que no fuera Monroe. Antes de que Ripley's accediera a prestarle la pieza a Kardashian, la invitaron a probarse una réplica para comprobar la talla. Le quedaba perfecto.
Poco después, el vestido original voló en avión privado desde Orlando, Florida, hasta la casa de Kardashian en Calabasas. Sin embargo, la segunda prueba no salió como estaba previsto: "El vestido viajó custodiado por guardias y tuve que ponerme guantes para probármelo", explica. "Siempre pensé que tenía muchas más curvas. Me imaginaba que podría tener menos talla en algunas zonas donde ella fuese más ancha y más ancha en zonas donde ella era fuese más estrecha. Así que cuando vi que no me quedaba bien quise ponerme a llorar porque no se puede modificar en absoluto".