Con los últimos preparativos para la coronación del rey Carlos III en marcha, la Casa Real británica dio a conocer las prendas que serán las grandes protagonistas del evento real más esperado de los últimos tiempos: las togas y las túnicas.
Los encargados en restaurar los trajes fueron la Real Escuela de Bordado y Ede & Ravenscroft, los sastres más antiguos de Londres. Uno de los puntos más importantes, además de las prendas recicladas del rey, fue la realización de cero de la prenda que llevará la reina consorte Camilla.
Según la tradición, los monarcas usarán dos conjuntos diferentes de túnicas durante todo el evento de la coronación. Por un lado, están las que van a lucir para llegar a la Abadía de Westminster: Carlos portará la que usó el Rey Jorge VI para su coronación, en 1937, que es de terciopelo carmesí. Cuando salga, usará una de terciopelo de seda, en color violeta y con bordados en oro. Esta también fue usada por el rey Jorge VI, pero en 1937.
Por otro lado, Camilla llegará a Westminster con una túnica de terciopelo carmesí que, originalmente, se realizó para Isabel II en 1953. Para la que llevará a la salida, los sastres realizaron un diseño especial que tiene distintos motivos bordados: los emblemas nacionales británicos, sus iniciales y abejas y un escarabajo, que reflejan el amor de la pareja real por la naturaleza. Además, las plantas que aparecen bordadas son sus favoritas, y simbolizan la esperanza y el amor. El detalle que llamó la atención es un lirio del valle, que era una de las preferidas de la reina Isabel II.
Ninguna de las prendas que usará Carlos es nueva. Los mismos fabricantes que confeccionaron los atuendos en las coronaciones anteriores fueron los que ajustaron estas prendas cargadas de historia y simbolismos para esta nueva coronación. Además de las togas de Estado, hay que sumar la supertúnica, el manto imperial, el Colobium Sindonis, el cinturón de la espada y el guante de coronación, elementos que ya fueron utilizados previamente en los servicios de coronación del rey Jorge IV, en 1821; Jorge V, en 1911; Jorge VI, en 1937 y la reina Isabel II, en 1953.