‘No le debo nada a nadie’ Elim Josué parte por delante y confiesa que estudia en Europa gracias a auxilio económico
El creador de contenido de Instagram también reveló que trabajó dos años en el Ifarhu.
El que quiso confesar antes de que alguien se enterara y le dieran palo anticipado, fue Elim Josué, el creador de contenido que recientemente estuvo envuelto en una polémica, tras denunciar que había un supuesto gusano en su plato de comida de Nación Sushi.
Sí, él mismo decidió romper el silencio y contar cómo fue que “salió bien agraciado” del Instituto para la Formación y Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu), donde trabajó dos años, durante la pandemia.
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“No lo estoy haciendo porque tenga miedo, ni porque debo algo, ni porque me sienta mal, lo hago porque quiero y porque siento que esta es una información pública que no se debería esconder”, empezó aclarando.
“Tengo un beneficio como auxilio económico para estudiar inglés en Europa y a su vez trabajé dos años en el Ifarhu y antes de que quieras emitir algún tipo de comentario primero necesito que vayas a ver este video”.
Tras advertir esto comenzó contando que empezó a trabajar en el Ifarhu en plena pandemia y fue una época difícil para él. Asegura que aún vivía con sus padres. Le contó a una compañera cómo tuvo que trabajar para poder graduarse de sexto año por un problema familiar, ya que su padre tuvo que ayudar a un familiar con cáncer y no podía costear sus estudios.
La amiga al ver su historia de lucha le habló de los auxilios económicos. Elim dice que aplicó dos veces y que la primera vez que se lo negaron lloró: “la segunda vez yo insistí, insistí, insistí, hasta que se me otorgó. Esto lo estoy diciendo con toda la sinceridad del mundo, porque no le debo nada a nadie, yo trabajé desde que tengo 16 años con mi papá, no soy hijo, ni sobrino, ni primo, ni tengo ninguna relación con una persona con algún cargo político”.
Al finalizar hizo alusión al caso del estudiante de medicina al que le fue negada la beca. Dice que conoce muy bien a Elías Johnson, porque es su vecino. Lo ayudó a vender las gelatinas para aportar su granito de arena.