La tutela de Amanda Bynes terminó oficialmente tras nueve años bajo los cuidados de su madre.
Según fuentes de la revista People, la exactriz pidió el mes pasado poner fin a su tutela y sus padres estaban totalmente de acuerdo en que ahora ella puede valerse por sí misma.
Su madre Lynn ha sido responsable de sus decisiones personales y médicas y de sus asuntos financieros desde 2013.
Documentos judiciales consultados por la publicación muestran que el juez asignado al caso – Roger L. Lund – dictó un fallo interino que entró en vigor el martes 22 de marzo, durante una audiencia en el Tribunal Superior del condado de Ventura.
Amanda, de 35 años, ha estado bajo tutela desde agosto de 2013 después de haber sido internada en una prisión psiquiátrica involuntaria. Amanda, que saltó a la fama como actriz infantil, fue diagnosticada con trastorno bipolar.
El año pasado, su abogado David A. Esquibias insistió en que ella estaba bien y que ya no necesitaba estar bajo tutela.
“Amanda está muy bien. Vive en la playa, va a la escuela y disfruta de las clases de meditación y del Ciclo del Alma (…) sus padres apoyan al 100% su decisión de ser liberada de la tutela”, señaló.