Camilla, duquesa de Cornualles, ha protagonizado este lunes el servicio de la nobilísima Orden de la Jarretera en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. La esposa del príncipe Carlos ya es miembro de esta institución, la más antigua y de mayor rango del Reino Unido con casi 700 años de antigüedad, que entierra sus raíces en la época medieval y que Eduardo III creó inspirado por las historias del rey Arturo y los caballeros de la mesa redonda.
Isabel II anunció en diciembre de 2021, el nombramiento de la duquesa, cuya ceremonia de investidura, cargada de pompa y boato, se ha producido este 13 de junio, tan solo unos días después del jubileo de Isabel.
Es la primera ceremonia que se hace desde 2019, debido a las restricciones por la pandemia y en ella han sido distinguidos, además de la duquesa de Cornualles, la baronesa Amos y el exprimer ministro británico Tony Blair. Al acto han asistido Isabel II y el duque de York.
Antes de que el tradicional desfile diera comienzo, otros de los miembros de la Familia Real que no pertenecen a la Orden han llegado en coche al Castillo de Windsor. Entre ellos, la duquesa de Cambridge, vestida con un total look en azul con zapatos destalonados al tono.
A su llegada se la ha visto charlando con la condesa de Wessex. No han faltado los dos hijos de Camilla de Cornualles, nacidos del primer matrimonio de la futura reina consorte.
También en los alrededores estuvieron Nicky, Kathryn, Euan y Leo, los cuatro hijos de Blair, que saludaron a su llegada con gran cariño a su madre, Cherie.