El exmarido de la cantante Britney Spears, Jason Alexander, se ha declarado no culpable tras ser detenido y acusado de un delito grave de acecho después de que intentara colarse en la boda de la estrella del pop, celebrada el pasado 9 de junio, según cuenta en exclusiva Page Six.
Según esta publicación, la fiscal de distrito adjunta principal de Ventura (California, EE UU), Erin Meister, explica que Alexander, de 40 años, fue procesado este martes por la denuncia penal presentada por la intérprete de Toxic en el Tribunal Superior del condado.
El que fuera marido de Spears intervino en la audiencia desde la cárcel, a través de Zoom. En la conferencia telefónica, se declaró inocente de todos los cargos relacionados con la cantante, incluidos tres delitos menores de allanamiento agravado: al negarse a salir de la propiedad privada, vandalismo y agresión.
Este arresto es el cuarto al que se enfrenta Alexander en el último año. En enero de 2021 fue puesto bajo custodia policial por conducir bajo los efectos del alcohol. La segunda detención se produjo en agosto del mismo año tras romper los protocolos de seguridad en un aeropuerto de Nashville (EE UU). Además, el pasado diciembre el exmarido de Spears fue detenido por violar una orden de protección y acosar a una mujer no identificada en Tennessee (EE UU). Se declaró culpable de los cargos el pasado 4 de enero y se le ordenó cumplir casi un año de libertad condicional.
Desde su detención el 9 de junio, el exmarido de la estrella del pop permanece en la cárcel tras imponérsele una fianza de 100.000 dólares (95.500 euros) y tendrá que volver a declarar el próximo 2 de agosto ante el mismo tribunal, en otra audiencia programada previa al juicio. Si acaba siendo condenado, Alexander podría enfrentarse a cinco años de prisión.