La OMS declara el fin de la emergencia sanitaria global por Covid-19
Aunque la cifra oficial de muertes por la pandemia es de unos 7 millones de personas, el director de la organización dijo que "es probable" que la cifra real sea más cercana a los 20 millones de muertos.
La emergencia sanitaria por la pandemia de Covid-19 ha terminado, anunció la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El anuncio se produce más de tres años después de que la organización declarara la enfermedad de coronavirus una "emergencia sanitaria global", el nivel de alerta más alto de la OMS.
Y representa el fin simbólico de la devastadora pandemia que provocó confinamientos en muchos países y alteró las economías alrededor del mundo.
Pero la OMS señaló que a pesar de que la fase de emergencia ha terminado, la pandemia no ha llegado a su fin.
"Es con gran esperanza que declaro el fin de la covid-19 como una emergencia sanitaria mundial", dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
"Esto no significa que la covid-19 haya terminado como una amenaza para la salud mundial", indicó.
Agregó que no dudaría en volver a convocar a los expertos para reevaluar la situación en caso de que la covid "ponga en peligro a nuestro mundo".
"Lo peor que cualquier país puede hacer ahora es usar esta noticia como una razón para bajar la guardia, desmantelar los sistemas que ha construido o enviar el mensaje a su gente de que la covid-19 no es motivo de preocupación, afirmó.
Millones de muertes
Aunque la cifra oficial de muertes por la pandemia es de unos 7 millones de personas, el director de la organización dijo que "es probable" que la cifra real sea más cercana a los 20 millones de muertos.
Y advirtió que el virus continúa siendo una amenaza significativa.
La Organización Mundial de la Salud declaró por primera vez la llamada emergencia de salud pública de preocupación internacional en enero de 2020.
Las vacunas fueron uno de los principales puntos de inflexión en la pandemia, lo que permitió que millones de personas estuvieran protegidas contra la enfermedad grave y la muerte.
Estados Unidos y Reino Unido, como muchos otros países, ya han hablado de "vivir con el virus" y han cancelado muchas de las regulaciones establecidas en la lucha contra él.
Pero en muchos países las vacunas no llegaron a la mayoría de las personas que las necesitan.