- Los grupos de autodefensa han proliferado y se han ganado el respeto de muchos.
Un cura mexicano pidió a sus fieles que "dejen el miedo para el diablo", se unan y ayuden a que el Gobierno ponga orden en sus comunidades para expulsar de una vez por todas al cartel narcotraficante de Los Caballeros Templarios, que domina el estado de Michoacán.
Gregorio López, vicario de Apatzingán, encabezó ayer un acto en el oeste de México en el que rezó "el rosario en silencio", y pidió apoyo para las autoridades a cambio de que estas hagan su trabajo y neutralicen de una vez por todas a los criminales.
En entrevista con Efe, López explicó que en él pretende "reivindicar la credibilidad de las fuerzas federales", que reforzaron su presencia esta semana en Michoacán y han lanzado una estrategia para devolver la seguridad en el estado más conflictivo de México en estos momentos.
López está convencido de que la operación lanzada por el gobierno del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, en Michoacán el pasado 13 de enero no va a funcionar si la gente no coopera y la autoridad empieza a detener a los líderes.
"Quiero hacer que la comunidad despierte, crea, confíe. Pero la cuestión es esta, muy delicada, porque si no (cumplen las autoridades), entran los comunitarios (las autodefensas). Si no dan pruebas fehacientes, entran los comunitarios", señala el sacerdote.
El acto se celebró en la plaza principal de Apatzingán.
El sacerdote lleva más de dos años trabajando en la Tierra Caliente de Michoacán, una región donde en los últimos meses se ha recrudecido la violencia.