Los manifestantes tomaron las calles el miércoles por segunda noche consecutiva, después de que un policía blanco en Berkeley, Misuri, matara a un joven negro de 18 años que, según la Policía, le apuntó con una pistola.
Docenas de manifestantes celebraron una vigilia en la gasolinera de este suburbio de Saint Louis, donde Antonio Martin fue baleado el martes por la noche, y bloquearon brevemente el tráfico en la Interestatal 170 durante una marcha antes de regresar a la gasolinera.
Entre seis y ocho personas fueron arrestadas, señaló a KMOV-TV el jefe de Policía local, Frank McCall.
Más tarde, unas 75 personas celebraron una protesta pacífica ayer en la mañana ante una iglesia cercana, según el St. Louis Post-Dispatch. Había policías presentes con equipo antimotines.