Franklyn Robinson había llegado "rico y delicioso" como dice él al Parque Omar, ayer. Mientras se encontraba en el lugar, la esposa de un empresario le dijo que cerrara su programa Suelta el Wichi porque es una porquería. "No es un buen ejemplo", le recalcó.
Y como ustedes saben como se pone el "marichui", le dijo sin asco a la chica que su marido era un ladrón. Luego, en el post que subió a sus redes sociales, Franklyn lo tildó de corrupto y coimero.